Diez años después de que se instalara el primero de los barracones que conforman el colegio público de La Cañada del Fenollar, en las partidas, padres y vecinos empiezan a ver la luz de un nuevo colegio para sus hijos.
El Ayuntamiento se ha comprometido a ceder a Educación una parcela que alcanza los 18.000 metros cuadrados, frente a los actuales 2.000 metros cuadrados con que cuenta el centro escolar, para que se construya el nuevo colegio.
Esta misma semana los concejales de Urbanismo, Miguel Ángel Pavón, y de Educación, María José Espuch, alcanzaron dicho acuerdo ante la directora territorial de Educación, Tudi Torró, quien a su vez ha admitido la necesidad de este centro para erradicar las prefabricadas.
La capacidad prevista será de una aula por cada curso desde Infantil a sexto de Primaria, y la tramitación comenzará en cuanto los vecinos y padres de alumnos den el visto bueno a los terrenos de los que ya dispone el Ayuntamiento, como destaca el edil de Urbanismo, Miguel Ángel Pavón, y que no tienen riesgo de inundabilidad, como sí sucede con la actual ubicación de las prefabricadas.
Sin ir más lejos, las lluvias de principios de noviembre encharcaron los barracones y echaron a perder el material escolar de los alumnos, como pudo apreciar in situ la propia edil de Educación, que se personó entonces para comprobar el alcance de los sucedido.
El exhaustivo informe presentado por los técnicos municipales sobre la situación de la parcela más idónea para acoger el nuevo centro escolar implica, no obstante, modificar el uso del terreno para incorporar el docente.
««Sería necesario tramitar una modificación de planeamiento para que la parcela incorporara a los usos deportivo y asistencial que actualmente contempla el Plan General, el uso docente, una modificación que podría tramitarse durante el periodo de redacción del proyecto para poder tener ajustada la calificación del suelo en el momento de iniciar los trámites para la obtención de la correspondiente licencia de obra», señalan.
Falta que la conselleria de el visto bueno técnico a la parcela y, a partir de ese momento, el Ayuntamiento tiene previsto «iniciar los trámites para modificar el planeamiento y ceder los terrenos», según destaca el vicealcalde, Pavón.
Coincidiendo con estas gestiones, los aseos de los barracones se habían embotado y los 180 escolares tuvieron que compartir durante unos días 6 retretes, como apuntan desde la AMPA. Ayer mismo se solucionó el problema.
