El tanatorio de La Siempreviva volvió a ser escenario ayer del cálido homenaje de amigos y familiares, así como de colectivos profesionales, académicos, políticos y sociales, a la profesora Concha Azorín Camarasa, fallecida en la madrugada del lunes.

A la ceremonia laica, celebrada en el mismo tanatorio y que concluyó al son del «Mediterráneo» de Serrat, asistieron también el presidente de la Generalitat, Ximo Puig, y el expresidente del PSPV Antonio García Miralles, entre otros. En la imagen, la exconcejal Laura Soler, hija de la fallecida, en un momento de la sentida intervención que dedicó a su madre.