Usted ha trabajado como abogada para la Plataforma en Defensa de la Ley de la Dependencia, ¿cómo se ven ahora las cosas desde el otro lado?
Las ves igual, pero es más fácil reivindicar que gestionar. Reivindicar sólo conlleva observar, detectar el incumplimiento por parte de la administración y denunciarlo. Pero cuando estás dentro no sólo tienes que hacer eso, sino que tienes que poner solución. Y cuando careces de recursos materiales y personales es duro, porque te das cuenta de que no puedes solventar en el tiempo que quieres ni como quieres los 20 años destrucción del anterior gobierno. Sabes qué hacer, dónde están los déficits, las necesidades, conoces las historias de la gente porque has estado ahí... y cuando estas aquí sufres porque sabes que al otro lado hay gente que lo pasa mal y tú no puedes solucionarlo todo en el tiempo en el que las personas lo necesitan.
Estrenó el cargo de secretaria autonómica casi a la vez que el de madre. ¿Cómo se lleva la conciliación dedicándose a la política?
Mi hija acaba de cumplir seis meses y mientras era lactante viajaba conmigo a todos sitios. Por mucho que tengas un cargo político la familia debe ser uno de los valores esenciales de cualquier persona. El cargo que ostento es muy importante para mí, por todas las personas que estan detrás, pero mi familia es igual de importante y también me necesita. Hay que respetar tiempos y ajustar la dedicación profesional.
