Roxane Capiau, una joven de 16 años que toca en la Orquesta Batiste Mut de El Campello y en la Federación de Plectro, fue la primera en pasar por las pruebas de selección de alumnos de pulso y púa en el Conservatorio. Al término confesaba estar aún «nerviosa», pero confiada en conseguir el objetivo de lograr una plaza. Roxane defendió que la música de plectro «puede ser una profesión y una forma de seguir avanzando» en el terreno académico. De manera parecida, anteponiendo la confianza a los nervios, se expresaban el resto de aspirantes. Por su parte, el presidente de la Federación de Plectro destacó también el hecho de que por primera vez un conservatorio de la Comunidad Valenciana ofrezca estos estudios y haga posible que «se pueda vivir profesionalmente» de su práctica y docencia. A. T.