La acumulación de vuelos en El Altet durante la jornada de ayer propició que se generaran algunos retrasos, que llegaron a ser de en torno a una hora, según los datos que el organismo público Aena fue ofreciendo a lo largo del día. En general, el inicio de la campaña de grandes desplazamientos con motivo de las vacaciones de Navidad transcurrió sin incidencias importantes, más allá de las lógicas molestias causadas por la espera. La afluencia de pasajeros fue masiva, tal y como estaba previsto, por el elevado volumen de pasajeros tanto de salida como de llegada, similar algunas puntas que se registran en verano.

Un ejemplo de estos retrasos fue el vuelo que debía haber salido del aeropuerto de Alicante-Elche con destino a la ciudad noruega de Bergen a las 16.10, y que despegó a las 17.15. También otro con destino a Palma de Mallorca previsto para las 16.40 salió justo una hora después. En el sentido inverso, un vuelo que debía haber despegado de Bilbao a las 16.25 lo hizo hora y media más tarde, de manera que aterrizó prácticamente con ese tiempo de retraso en El Altet, a las 19.10. Otras llegadas desde Amsterdam y Copenhague registraron demoras de media hora. No obstante, la mayoría de las operaciones, tanto de salida como de llegada, sólo sufrieron pequeños retrasos, de 15 minutos como máximo, algo que, unido a la puntualidad absoluta de otro buen número de vuelos, mostró que la jornada se desarrolló con relativa normalidad a pesar del gran incremento de la actividad.

Estaba previsto que a lo largo de ayer pasaran por la terminal de Alicante-Elche un máximo de 36.000 viajeros, en las 235 operaciones de salida y llegada que había programadas. Este trasiego, además, tenía puntas de actividad de 30 despegues y aterrizajes a la hora, lo cual, de una forma un tanto lógica, podía complicar con cierta facilidad el cumplimiento estricto de los horarios. Este mes de diciembre, tal y como publicó este periódico hace unos días, se considera temporada alta en El Altet debido a la campaña de las vacaciones de Navidad y, además, el incremento de la actividad derivado de la inestabilidad en Turquía y el norte de África y el clima excepcionalmente cálido que está haciendo en las últimas semanas.