La primera mesa de diálogo para abordar el problema de los veladores convocada ayer por el Ayuntamiento de Alicante se zanjó en algo menos de una hora y sin propuestas concretas que permitan avanzar en la solución al conflicto, motivo para el que fue creada. Desde el tripartito emplazaron a hosteleros y vecinos para dentro de dos semanas (el 28 de diciembre) para presentar entonces sus propuestas en una reunión con técnicos municipales.

Además de la falta de contenido, la primera reunión estuvo lastrada por la ausencia de los sindicatos (CC OO y UGT rechazaron la invitación que el alcalde les realizó la tarde de antes al entender que debe abordarse en el Consejo Social de la Ciudad), así como de comerciantes y entidades que, como la Cámara de Comercio y Coepa, respaldaron la petición para crear este foro. En estos tres últimos casos porque, según afirmaron las diferentes organizaciones, no fueron invitadas a asistir.

Aunque, tras la reunión, el portavoz, Natxo Bellido, y el vicealcalde y edil de Urbanismo, Miguel Ángel Pavón, consideraron que sí habían sido invitados y que Alcaldía era la responsable de cursar las invitaciones, desde Alcaldía afirmaron después que lo habían dejado en manos de la presidenta de la Asociación de Hosteleros, María del Mar Valera, que lo niega y recuerda que la convocatoria partía del alcalde. Desde Alcaldía aseguraron que de cara a la nueva reunión, sí se convocará a las organizaciones empresariales y comerciales, que están dispuestas a asistir si se las invita, según coincidieron en apuntar. Sí acudieron ayer representantes de tres asociaciones de vecinos del centro y del Casco Antiguo, de la Plataforma contra el Ruido, de la de hostelería y locales de ocio, así como de los grupos políticos del equipo de gobierno y de la oposición.

Pavón confirmó que «no se ha hecho ninguna propuesta concreta» y que, por parte del equipo de gobierno, «se han planteado las líneas generales» a tratar en el foro, con carácter consultivo. Incidió en que «se parte de una situación de desequilibrio a favor de la hostelería» y que además de los planes de ordenación de veladores en seis espacios del centro (Gabriel Miró, Rambla, San Cristóbal, calle Mayor, Castaños y Luceros) se abordará «el control del ruido en los locales, la vía pública y el que llega a las viviendas».

Pavón quiere partir de unos «mínimos consensuados», para lo que pidió «generosidad a vecinos y hosteleros». Recordó que hay zonas, como Castaños, en el que la distribución de los veladores no cumple con los requerimientos de Bomberos, y que estudiarán si las terrazas dejan un pasillo libre en el centro (como quieren los vecinos).

En cuanto a los horarios, apuntó que los vecinos «dejan entrever» que plantearán reducir no sólo los de los veladores, sino también de los locales de ocio. Se trata de una competencia del Consell, pero Pavón asegura que «el Ayuntamiento lo podría pedir y se va a estudiar». Sobre si el adelanto del cierre de las terrazas en Gabriel Miró a la una de la madrugada se puede extender a otras zonas, indicó que «no hay una directriz genérica», si bien apuntó que «tampoco lo descartamos» y que, en su opinión, en las zonas saturadas «hay que estudiar una reducción» y que «lo lógico sería armonizar para que la gente no se vaya en masa de un sitio a otro». Pavón también se refirió a la reivindicación de que la Policía Local realice mediciones de ruido y aseguró que «pondremos medidas».

«Es algo que llevamos pidiendo mucho tiempo», destacó la presidenta de la asociación de vecinos del Centro Tradicional, Alcázar Moreno, quien calificó el foro de «pérdida de tiempo» y avanzó que sus propuestas serán «que se cumpla la ordenanza y se reduzcan horarios». Desde la asociación de vecinos del Casco Antiguo, María Dolores Peretó, coincidió al exigir «que se cumpla ordenanza».

La asociación de hosteleros (Apeha) aseguró que planteará alternativas y la de locales de ocio (Alroa) que están dispuestos a negociar y que «iremos con ánimo constructivo», agregó el presidente, Lalo Díez.