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Las alicantinas retrasan la maternidad por primera vez a después de los 30 años

Los cambios en las pautas sociales y la situación económica hacen que se aplace cada vez más el paso de tener un hijo aunque la provincia está algo por debajo del conjunto del país

Asistentes a una feria de artículos de bebé en IFA, en una imagen de archivo SERGIO FERRÁNDEZ

La media de edad a la que las mujeres alicantinas son madres ha sobrepasado por primera vez los 30 años, tal y como revelan los datos que acaba de hacer públicos el Instituto Nacional de Estadística (INE). Según este organismo, la edad media a la maternidad primeriza se situó el año pasado en 30,04 años, dos décimas más que en 2013. La cifra es muy significativa porque es la primera vez que este indicador demográfico sobrepasa la barrera de la treintena, además de ser una muestra de cómo están cambiando las pautas sociales en este aspecto en las últimas décadas.

Las alicantinas vienen aplazando la decisión de tener un hijo de manera casi continua desde 1978. Aquel año, la media de edad de la maternidad en la provincia se situó en 24,4 años. Los profundos cambios que se han producido desde entonces en la sociedad -y más aún en el caso de la mujer- han hecho que la edad se eleve de manera progresiva. Pero además, la coyuntura económica negativa de la época más reciente ha hecho que este proceso se haya acelerado desde 2007. Justo antes de iniciarse la crisis, la edad media de las madres primerizasmadres primerizas alicantinas era de 28,73 años. Desde entonces este indicador sólo dejó de subir en 2013, y de forma mínima.

En líneas generales, puede decirse que se consolida cada vez más la tendencia de anteponer las inquietudes y necesidades académicas, profesionales y laborales a los deseos de ser madre, o incluso la misma inquietud por serlo. Así lo subraya el presidente de la delegación del Colegio de Geógrafos de España en la Comunidad Valenciana, Alberto Lorente, que recuerda que el mercado laboral es en estos momentos «muy exigente, y bastante más para la mujer». Con la crisis, además, «la estabilidad es todavía mucho más complicada por lo que nadie piensa en casarse ni en tener el primer hijo».

Lorente también apunta a la «pérdida de influencia de la religión» en el conjunto de la sociedad, que ha contribuido notablemente a que haya «cambiado la forma de pensar» a la hora de tener hijos, o el mismo concepto de familia. A grandes rasgos, «se es más individualista» y la creación de un núcleo familiar tradicional ha dejado de ser una aspiración para muchas personas.

Todas estas cuestiones han llevado a que el paso de tener un hijo se dé cada vez más tarde. Aún así, la provincia de Alicante se sitúa ligeramente por debajo de la media nacional; en el conjunto de España, las mujeres son madres por primera vez a los 30,55 años. La provincia con la maternidad más tardía es Soria, con 32,02 años, mientras que en el otro extremo se sitúa Almería, con 28,92, junto con las ciudades de Ceuta y Melilla, cuyos índices son de 28,21 y 27,63 años, respectivamente.

Población envejecida

El retraso en la maternidad va creciendo en paralelo al envejecimiento demográfico, que cada vez se hace más evidente. La media de edad de la población de la provincia no ha dejado de crecer en ningún momento a lo largo de las últimas cuatro décadas, y se acerca ya a los 43 años. En el caso de las mujeres, cuya longevidad es mayor, se sobrepasa esa cifra, hasta una media de 43,7, mientras que en los hombres se sitúa en 41,73. La demarcación alicantina está ligeramente más envejecida que la media estatal, que es de 42,46 años. Eso sí, aún queda muy lejos de Ourense y Zamora, las provincias situadas a la cabeza en este sentido, donde la respectiva edad media de la población es de 49,78 y 49,57 años.

En el envejecimiento demográfico en Alicante influye, aunque ya menos que en el pasado, la presencia de residentes de otros países europeos, tal y como recuerda el presidente de los geógrafos de la Comunidad. Eso sí, Lorente alude también a la marcha de muchos extranjeros jóvenes como consecuencia de la crisis, así como de españoles también en edad joven.

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