Las discrepancias y tensiones dentro del tripartito que gobierna en el Ayuntamiento de Alicante (PSOE, Guanyar y Compromís) comienzan a hacerse cada vez más evidentes hasta el punto de que ayer rompieron con su igualdad de voto con motivo de la política de personal del PSOE y por el «ninguneo» que, según Guanyar, se realiza de sus concejalías. Aunque son múltiples las fricciones, es la primera vez que dentro del tripartito se da una división de voto y coincide con el inicio de la campaña de las elecciones generales.
Fue la propuesta del PSOE de modificar puestos de trabajo y jefaturas la que rompió la unidad de voto del tripartito en la Mesa Negociadora de Personal. Guanyar votó que el punto se retirara del orden del día, al entender que las concejalías de su cometido habían sido ignoradas, mientras Compromís se abstuvo y el PSOE votó a favor de mantenerla. Los socialistas lograron que su propuesta se debatiera, se votara y saliera adelante con el único apoyo político de PP y Ciudadanos. Los grupos de la oposición primero se abstuvieron, pero a petición de los populares votaron por segunda vez para apoyar al PSOE y romper el empate provocado por las discrepancias del tripartito.
Sindicatos y oposición coinciden al destacar la tensión entre el vicealcalde y líder de Guanyar, Miguel Ángel Pavón, y el concejal de Recursos Humanos, el socialista Carlos Giménez. Unas relaciones dañadas que se arrastran desde el arranque del mandato, cuando el edil socialista nombró como su asesora a la mujer del exsenador Ángel Franco, provocando con ello la primera crisis interna dentro del tripartito.
Pavón exigió que la modificación de la Relación de Puestos de Trabajo propuesta por el PSOE se aplazara hasta debatirse en una mesa técnica que todos los grupos políticos y sindicatos aprobaron ayer por unanimidad. El vicealcalde, de Guanyar, se quejó del «ninguneo» a las concejalías que dirige su grupo político, teniendo en cuenta que las modificaciones de personal tenían que ver con áreas dirigidas por el PSOE (en su mayoría) o para dar estructura a nuevas áreas que dependen de Compromís, como Igualdad o Memoria Histórica.
Pacto de gobierno
Aunque Giménez justificó la urgencia de la modificación de personal «para que las concejalías puedan trabajar plenamente» y suplir la falta de personal en áreas «como Recursos Humanos», que él mismo dirige, Pavón consideró que se trata de cuestiones que podrían esperar a debatirse en la mesa técnica y realizar una modificación «integral» de la estructura de personal del Ayuntamiento como, recuerda, figura en el pacto de gobierno del tripartito. La modificación puntual de ayer es, en opinión de Pavón, «un parche más como los que hacía el PP y que yo he criticado» (desde la oposición del mandato anterior).
Para el portavoz de Guanyar «no se puede actuar de manera unilateral» y asegura que sus socios del PSOE no le consultaron previamente, algo que Giménez niega. El portavoz de Compromís, Natxo Bellido, justificó su abstención al entender que algunas modificaciones de personal podrían esperar a que se consensuaran en la mesa técnica.
«Su propia oposición»
El PSOE logró así que la modificación de personal se mantuviera en el orden del día, con el apoyo de PP, Ciudadanos y de los sindicatos, a excepción de CC OO que se opuso y planteó que primero se debatiera en la mesa técnica creada y que «llevamos reclamando 17 años», explicaron. Para el edil del PP José Ramón González «Pavón se ha convertido en la oposición de su propio gobierno».
Una vez que se acordó mantenerlo en el orden del día, Pavón y Bellido se marcharon para asistir al Consejo de Administración del Puerto, por lo que no votaron el contenido de la modificación de puestos. Se trata de una quincena de puntos que salieron adelante. «Pedimos que cambiaran la fecha (de la mesa negociadora) y ni caso», aseguró Pavón.
