Más de 3.800 familias de la provincia de Alicante ya han solicitado de forma telemática el pago de 100 euros por los libros de texto, según los datos proporcionados ayer por la Conselleria de Educación. Se trata de la cifra más baja de la Comunidad, ya que en Castellón han sido 7.845 las peticiones hechas y en Valencia, 9.159.

Desde ayer, las familias ya pueden tramitar en los ayuntamientos -o en los puntos designados por estos- esta ayuda inicial de 100 euros, aunque en la provincia de Alicante, de momento, sólo desembolsarán el dinero 52 consistorios que ya han recibido 4,5 millones del Consell para adelantar este dinero a los padres. El resto, como en el caso de la ciudad de Alicante, lo hará a partir del 1 de enero debido a los problemas presupuestarios. En este sentido, la Concejalía de Educación del Ayuntamiento de Alicante señaló ayer que ya ha previsto una partida de 2,7 millones en el presupuesto de 2016 para sufragar la ayuda a cerca de 42.000 alumnos del término municipal.

La concejala de Educación, María José Espuch señaló ayer que una vez se establezca el procedimiento para hacer efectivo el programa de gratuidad de libros de texto y material curricular «informaremos a las familias a través de los centros educativos y de la página web de Educación, con tiempo suficiente para la presentación de la documentación requerida y de las oficinas de registro que se habilitarán para este fin».

Sólo tres ayuntamientos alicantinos no se han unido a la XarxaLlibres por cuestiones económicas, que son Famorca, Tollos y Onil. Para los 1.300 alumnos de estas localidades, el conseller Vicent Marzà ha prometido que habrá una solución para que no se queden sin la ayuda. Cabe recordar que a este desembolso de 100 euros -que se ingresarán en las próximas semanas en la cuenta que los padres hayan facilitado- seguirá otra a final de curso si las familias devuelven los libros en buen estado.

La portavoz de Educación del PP en Les Corts, Beatriz Gascó, criticó ayer que tres meses después del anuncio de la puesta en marcha de XarxaLlibres «las familias no hayan visto un euro y todavía tardarán en hacerlo», y considera que esta iniciativa se convertido «en otra chapuza» del Consell. La diputada sostiene que el Gobierno valenciano es «especialista en lanzar eslóganes y propaganda pero a la hora de gestionar son un desastre».