Los representantes de los padres de la concertada ya están fuera del Patronato Municipal de Educación Infantil que aprobó ayer sus nuevos estatutos en los que se excluye a las asociaciones de vecinos y a las federaciones de padres de los centros privados. La decisión se adoptó con seis votos a favor y seis en contra, por lo que fue necesario recurrir al voto de calidad de la presidenta, la concejala de Educación, María José Espuch, quien argumentó que la modificación da representación a los trabajadores y promueve la igualdad entre niños y niñas. A favor de la propuesta votaron PSOE, Compromís y las representantes de las dos AMPAS de las Escuelas Infantiles, y en contra, la representante de la FAPA de centros concertados, la de la FAPA Gabriel Miró, PP y Ciudadanos mientras que Guanyar se abstuvo.

La representante de la concertada, Julia Llopis, mostró ayer su indignación ante esta decisión que achacó a que «se quitan de encima a quienes les resultamos molestos», añadiendo que «así excluyen al 35% de las familias con niños». La portavoz del PP, Asunción Sánchez Zaplana, censuró por su parte la «falta de diálogo» del gobierno municipal al que acusó de querer controlar el consejo rector.