Alumnos y profesores de las autoescuelas de la provincia se concentraron ayer frente la Delegación Territorial de Tráfico para exigir que se solucione el colapso que sufre la realización de los exámenes para obtener el carnet de conducir en Alicante. La plantilla de los examinadores es escasa y la huelga que llevaron a cabo durante un mes ha provocado un tapón que no se va a solucionar hasta enero. Los examinadores han conseguido ya su objetivo -entre otras medidas comunicar las notas pasada una hora del examen- pero los damnificados siguen siendo alumnos y autoescuelas.