El presidente del Sindicato de Regantes del Acueducto Tajo-Segura, José Manuel Claver, anunció ayer en Alicante que el Ministerio de Agricultura ha cortado ya el agua que enviaba por el trasvase para regadío, y que los próximos desembalses serán sólo para el abastecimiento urbano. Claver advirtió, por otro lado, de que con los 30 hm3 de agua desalada que han comprado a la empresa Acuamed de la planta de Torrevieja cubrirán los regadíos hasta diciembre, por lo que a partir de enero necesitarán agua de trasvases, ya que con la desalada, cuatro veces más cara, tampoco es suficiente.

Los regantes, al igual que el Instituto Interuniversitario de Geografía de la Universidad de Alicante, plantean al Gobierno que habilite una conexión hacia el Segura desde el Tajo-Medio en la sierra de Gredos, donde el régimen de lluvias es de 2.500 litros por metro cuadrado al año y el caudal es mineral. Claver hizo estas declaraciones tras la constitución del Foro Pro Agua, un «lobby» del que forman parte las universidades de Alicante y Elche, empresarios y el 90% de las asociaciones de regantes de la provincia, que nace como el objetivo de acabar con la marginación que sufre la provincia de Alicante en la distribución del agua en España. El lobby tiene un carácter apolítico, pero su portavoz, el catedrático Antonio Gil Olcina, aseguró que el espíritu será de colaboración absoluta pero desde la independencia. De hecho, algunos de los miembros de foto forman parte también de la Mesa del Agua de la Diputación.

«El agua es una cuestión de Estado y no debe utilizarse como baza electoral». Este es mensaje que lanzó ayer Antonio Gil Olcina, en la presentación del Foto Pro Agua, colectivo en el que está representado todo aquél que tiene que decir algo del problema del agua en una provincia que ocupa entre el cuarto o quinto lugar de España en aportación al PIB, «pero que luego no es correspondida en un tema tan crucial como el del agua», subrayó Olcina, que advirtió de los problemas graves que pueden ahora mismo comprometer el futuro de la provincia. Gil Olcina se refirió al fallido trasvase Júcar-Vinalopó, inviable hoy porque el agua de Cullera no sirve y porque el río se ha ido secando mientras crecían las extracciones de agua en el acuífero de la Mancha Oriental, «con autorización para sacar 250 hm3 y del que se extraen todos los años 400 hm3. Mientras, en Villena hay pozos donde se perfora el agua a 300 metros de profundidad».

Regantes, Universidad de Alicante, Universidad Miguel Hernández, diversas instituciones, Coepa, Cámara de Comercio e Ineca apadrinaron el Foro Pro Agua que nace con el objetivo de buscar y presentar soluciones «viables y sostenibles para el déficit hídrico de la provincia. Gil Olcina defendió la continuidad del trasvase Tajo-Segura porque tiene mucha agua y perfectamente transferible». No obstante, subrayó que aunque la cabecera del Tajo está en un proceso de sequía, eso no se produce en el Tajo medio, donde «hay mucha agua y de calidad excelente». El catedrático explicó que «en su cabecera es un sotavento longitudinal y por tanto está más expuesta a la sequía que las faldas meridionales de la sierra de Gredos», y recordó la incongruencia de que se esté recortando el agua que se envía a Alicante y mediante un convenio todos los años se entreguen a Portugal 7.000 hm3, cuando España sólo está obligada a trasvasar 2.500 hm3.