La Concejalía de Medio Ambiente trasladará a la Dirección General de Costas una solución definitiva para evitar la llegada de residuos y los desperfectos, por las trombas de agua, en la playa de la Albufereta, que tras las fuertes lluvias del pasado 13 de octubre ha quedado partida en dos. Una gran laguna de agua putrefacta divide la arena desde entonces a causa de las avenidas por el barranco del Juncaret, que tiene su salida natural en plena playa. El agua estancada ha criado verdina y espuma, y va a más de un día para otro, con malos olores y mosquitos.
En el proyecto que van a elevar a Costas, el Ayuntamiento prevé la ejecución de un desagüe en la salida natural del barranco, sobre el que situaría una placa de hormigón, «con una capa relativamente fina de arena para que, cada vez que hubiera una tromba de agua, solo se pierda esa capa de arena, que se repondría de una manera más sencilla una vez finalizado el temporal», tal y como explicó ayer el concejal de Medio Ambiente, Víctor Domínguez.
Desde el Ayuntamiento indican que se trata una solución definitiva a un problema endémico en la Albufereta, ya que cada vez que hay lluvias fuertes «los residuos van a la playa al ser la desembocadura natural del barranco, lo que incluye ademas de la suciedad en la arena, destrozos». Los últimos tuvieron lugar hace dos semanas pero con anterioridad los hubo también en septiembre, y se tuvo que reponer arena de otros puntos de la playa. Ahora la asociación de vecinos reclama un aporte extra dado que gran parte de la arena se la han ido tragando los temporales. De momento, y hasta que se presente el proyecto a Costas, el Ayuntamiento informa que se esperará a que pase la época de lluvias para adecentar la zona.
Barranco de las Ovejas y vertidos
Por otra parte, una avería eléctrica afectó al sistema informático de la estación de bombeo de la Cross entre las siete y media, y las nueve y media de la mañana de ayer, lo que provocó la aparición de vertidos en el Barranco de las Ovejas. Técnicos de la Concejalía de Medio Ambiente y de Aguas de Alicante confirmaron el origen del problema, que bloqueó la estación principal y la de repuesto, por lo que rebosó el agua del alcantarillado, apuntó Víctor Domínguez. Medio Ambiente dio por solucionada la avería a las 10 horas.
