La oleada de robos a ancianos del mes pasado y la creciente inseguridad que afirman sentir en el barrio Juan XXIII ha obligado a los vecinos a dar una llamada de socorro a la que han respondido los responsables de la seguridad ciudadana de Alicante. Tras la solicitud la semana pasada, ayer se reunieron en la sede de la asociación de vecinos el subdelegado del Gobierno, Alberto Martínez, junto a responsables de la Comisaría Norte y también de la Policía Local de Alicante. En ella dieron cuenta de las actuaciones que desarrollan en la zona y «se han comprometido a trabajar más», explica el tesorero de la asociación, Antonio Morcillo.

Los vecinos explican que en septiembre se produjeron muchos atracos a personas mayores, entre ellos el robo con agresión al presidente de la asociación, Manuel Medina. «Hay 19 denuncias en Comisaría y los que no han denunciado por miedo, esto se está degradando mucho», lamenta Morcillo, quien explica que la inseguridad va en aumento.

Por su parte, el edil de Seguridad, Fernando Marcos, explicó «hace semanas que vigilamos las salidas de las actividades de los centros de mayores» y señala que cuentan también con apoyo en acciones puntuales de la Policía Nacional.

Mientras, los vecinos reclaman mayor presencia policial, como hasta hace dos años cuando «teníamos dos policías patrullando por los pasajes».