Alquilar para sobrevivir. El Gobierno apuesta por el arrendamiento de Casa Mediterráneo para actos puntuales con el fin de que la sede aumente sus ingresos y realice más actividades. El centro diplomático, situado en la antigua estación de Benalúa de Alicante, ha pasado desde su constitución en 2009 por problemas económicos, fundamentalmente derivados de la falta de aportación de los ayuntamientos de Alicante y Benidorm.
Ahora, el Ejecutivo central, en una respuesta parlamentaria, asegura que Casa Mediterráneo requiere una última fase de obras que mejore los espacios «y permita a la edificación potenciar su ingresos mediante el arrendamiento puntual a terceros». Con ello, el Gobierno central considera que la institución pública «incrementaría sus recursos y ampliaría la actividad».
En la respuesta ofrecida a los diputados socialistas Herick Campos y Rufino Selva, la administración central asegura que para poder llevar a cabo esta iniciativa requiere la obtención de una licencia, un procedimiento administrativo que es competencia del Ayuntamiento de Alicante.
Por ello, está manteniendo conversaciones con el consistorio, al frente del cual está el socialista Gabriel Echávarri, para conocer los requisitos específicos y poder obtener dicha licencia, ya que los desconocen. «Confiamos en que tengan el detalle de informarnos de los requisitos arquitectónicos que necesitamos para poder acometer esta última fase de obras, necesaria para culminar la sede y proceder a su arrendamiento», explican fuentes del consorcio.
Por su parte, el edil de Urbanismo, Miguel Ángel Pavón, asegura que el Ayuntamiento tiene que revisar la licencia para que se ajuste a las obras realizadas hasta la fecha y mostró su «voluntad» por que se haga con prontitud.
No obstante, deja claro que es la entidad pública dependiente del Ministerio de Asuntos Exteriores la que tiene que solicitar el documento administrativo «y el Consistorio comprobar que las obras se adecuan a lo concedido».
Celebración de congresos
Casa Mediterráneo confirma su intención de alquilar el inmueble «para conseguir una financiación extra, ya que los administraciones locales no pagan», pero siempre «dentro de los objetivos» del Consorcio, como por ejemplo, congresos y reuniones, pero descarta que se utilice para eventos como bodas o desfiles.
Hace dos años, la entonces directora general de Casa Mediterráneo, Almudena Muñoz, lanzó la idea de alquilar la sede para bodas, una ocurrencia que el propio ministro de Asuntos Exteriores tumbó, de modo que solo se puede alquilar para actos culturales.
De hecho, poco después Adif (que tiene cedida la estación por un periodo de 30 años más quince prorrogables) firmó un acuerdo con la entidad por el cual las instalaciones solo se pueden arrendar para la celebración de foros y certámenes, exposiciones o congresos internacionales.
