Información

Información

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

El AVE deja León a seis horas de Alicante, igual que Barcelona

Los trabajos del Corredor Mediterráneo y las obras del tercer carril desde Valencia alargan el viaje

La reciente puesta en servicio de la línea de alta velocidad entre Valladolid y León -prolongación de la que ya llegaba a la ciudad del Pisuerga desde Madrid- ha puesto de manifiesto la paradoja entre el desarrollo de infraestructuras ferroviarias nuevas con origen en la capital del país y la acusada lentitud de otras como el Corredor Mediterráneo. Desde la semana pasada, el trayecto directo en un tren Alvia entre Alicante y León se ha reducido a prácticamente seis horas -unos pocos minutos menos, para ser exactos-, mientras que algunos de los Euromed y Talgo que unen Alicante y Barcelona están empleando casi el mismo tiempo. León dista de la capital alicantina unos 840 kilómetros por ferrocarril de alta velocidad, unos 300 más que la distancia a Barcelona.

Esta situación es en parte transitoria, ya que uno de los motivos de que la duración de los trayectos en tren en el Corredor Mediterráneo son las obras del tercer carril que se llevan a cabo entre Valencia y Castellón. Estos trabajos -de cuya repercusión sobre los tiempos de viaje ya informó este periódico- comenzaron en agosto y en principio debían durar en torno a un mes, pero aún no han finalizado. Por ello, algunos Euromed y Talgo siguen tardando hasta 45 minutos más que antes de comenzar a ejecutarse el proyecto. En principio, antes de final de año estará ya concluido, y a Castellón podrán llegar también trenes de ancho internacional desde Valencia y Madrid. Sin embargo, el verdadero tapón que colapsa el Corredor Mediterráneo, el tramo de vía única en Tarragona, no va a estar subsanado aún a corto plazo.

Los trabajos del nuevo trazado que ha de evitar el paso por ese tramo están activos, pero a un ritmo bastante lento, lo que invita a pensar que los trenes de larga distancia aún seguirán circulando bastante tiempo por vía única de ancho convencional y compartiendo el trazado con todo tipo de tráfico. Asimismo, hay que tener en cuenta que la modernización del Corredor Mediterráneo también está pendiente de otros proyectos como la finalización y puesta en servicio del trazado en ancho internacional entre La Encina y Valencia, del que está hecha la plataforma. Así, la dicotomía entre la situación de los corredores radiales de alta velocidad y las comunicaciones transversales previsiblemente seguirá aún dándose durante bastante tiempo.

El servicio Euromed entre Alicante y Barcelona -prestado en la actualidad por trenes del mismo modelo que el Alvia- comenzó a funcionar en 1997, tras duplicarse y adaptarse a velocidades máximas de 220 kilómetros por hora parte del recorrido.Al principio, los trenes invertían unas 4 horas y 45 minutos en hacer el recorrido Alicante-Barcelona; antes de comenzar las obras en Valencia y Castellón algunos trayectos ya rondaban las 5 horas de duración. Ahora, con esta incidencia, dos de los servicios tardan más de 5 horas y 50 minutos en cubrir la misma distancia.

Evitar el tapón en Madrid

Los trenes que comunican Alicante con Castilla y León podrían ser aún más rápidos -y, por lo tanto, alcanzar claramente León, Palencia, Valladolid y otras ciudades en menos tiempo que Barcelona- si ya estuviera en servicio la conexión en ancho internacional entre las estaciones madrileñas de Puerta de Atocha y Chamartín. Ahora mismo, las maniobras de salida y entrada en ellas hacen que los trenes pierdan casi una hora en la capital de España, con el consiguiente lastre para los viajes desde Castilla y León, Asturias, Cantabria y Galicia hacia Alicante o alguna estación intermedia.

Desde el Administrador de Infraestructuras Ferroviarias (Adif) han señalado a este periódico que el túnel entre Puerta de Atocha y Chamartín ya se encuentra horadado, y que el pasado mes de mayo se adjudicaron las instalaciones de señalización, telecomunicaciones y eletrificación. Este túnel, de 7,3 kilómetros de longitud, ha supuesto ya una inversión de 206 millones de euros -sólo en plataforma, vía e instalaciones de protección civil y seguridad- y evitará todas las maniobras que se hacen en la actualidad para que los Alvia puedan ir de una estación a la otra.

El proyecto también incluye la ampliación de capacidad de la plataforma -de dos a cuatro vías- desde Puerta de Atocha a Torrejón de Velasco (34 kilómetros), punto donde se bifurcan las líneas a Andalucía y a la Comunidad Valenciana. En este caso, la plataforma ya está ejecutada, tal y como recuerdan también desde Adif. El montaje de vía se adjudicó en julio, mientras que el resto de actuaciones están ya también adjudicadas o en fase de licitación. Eso sí, aún no se ha fijado una posible fecha de entrada en servicio de estas nuevas infraestructuras.

Compartir el artículo

stats