Vallas en pie protegiendo el yacimiento y el recinto limpio de basura y de excrementos de perros. Así ha amanecido los últimos días la Villa Romana de las Naciones, un Bien de Interés Cultural (BIC) situado en la avenida Míriam Blasco que llevaba meses presentando un abandono alarmante.

Hasta hace apenas unos días, el recinto -al que se sigue pudiendo acceder por los agujeros en el perímetro realizados por residentes en la zona- contaba con las vallas que protegen al yacimiento derribadas y el suelo repleto de basura y de excrementos de perros. Incluso, vecinos denunciaron la existencia de escombros de obra en una de las «entradas». Tras la denuncia vecinal que recogió este diario hace tres semanas, el recinto ha amanecido adecentado, aunque aún con deficiencias. Fuentes del Ayuntamiento no pudieron precisar ayer los trabajos acometidos en la zona.