El vicealcalde y responsable de Urbanismo, Miguel Ángel Pavón, ha devuelto al área urbanística al arquitecto Manuel Beltrá, uno de los técnicos municipales que, asegura, fue «degradado» por la exalcaldesa, Sonia Castedo, y acabó siendo trasladado a otra concejalía (Imagen Urbana) a finales de 2012. Pavón pone a Beltrá como jefe del Departamento de Planeamiento, un puesto de gran peso en Urbanismo y clave para una ciudad que tiene por delante la redacción de un nuevo Plan General.

El nombramiento, no obstante, es provisional hasta acometer una profunda remodelación del organigrama de la Concejalía de Urbanismo que comenzó a primeros de agosto con el traslado a otra concejalía de Isabel Campos, la técnico imputada en la causa judicial del Plan Rabasa. Pavón tiene en cartera eliminar la jefatura que ahora ocupa el otro técnico urbanístico imputado, José Luis Ortuño, sin que, por el momento, el edil haya revelado cuál será su destino. En esa remodelación integral dentro de Urbanismo, que puede durar 3 ó 4 meses, Pavón tiene previsto sacar a concurso de mérito las jefaturas de departamento, como la que ocupa ahora Beltrá.

La jefatura del Departamento de Planeamiento está vacante desde que se jubiló el arquitecto Miguel Ángel Cano a finales de 2013. Ahora será ocupada por el arquitecto municipal Manuel Beltrá «degradado en su momento por la exalcaldesa del PP, Sonia Castedo, por oponerse a firmar documentos de operaciones urbanísticas, ahora bajo sospecha dentro del sumario del caso Brugal», sostiene Pavón en un comunicado.

«Es inconcebible que la Concejalía no contara con un jefe de Planeamiento, una jefatura fundamental para gestionar el urbanismo de la ciudad», destacó Pavón. El edil subrayó que está pendiente la remodelación de la estructura de Urbanismo, «pero hemos querido cubrir antes esa vacante», con el objetivo, sostiene, de «corregir una ausencia injustificable en la estructura de Urbanismo y para poder trabajar junto a un reconocido arquitecto municipal los importantes retos pendientes en la ciudad en materia de planeamiento». Entre ellos, Pavón destaca «desde las posibles alternativas para la implantación de una tienda de Ikea en Alicante, hasta el nuevo Plan General, pasando por el plan de Sangueta».

El que en su momento fuera jefe de Servicio de la Oficina de Proyectos Públicos «fue uno de los arquitectos y técnicos municipales desterrados del área de urbanismo por el anterior Gobierno del PP», agrega Pavón. El edil recuerda que en 2005 Manuel Beltrá fue uno de los técnicos que dieron el visto bueno al Plan General de Ordenación Urbana redactado por el urbanista catalán Lluís Cantallops «al que posteriormente despidió Luis Díaz Alperi por negarse a diseñar la ciudad a golpe de pelotazo». El concejal califica de «incomprensible» que «un arquitecto con una reconocida trayectoria y prestigio en la cuidad de Alicante y con mas de 30 años de servicio estuviera relegado en una Concejalía de poca relevancia como Imagen Urbana, que en breve desaparecerá para integrarse en la de Urbanismo».

Pavón recuerda en un comunicado que el arquitecto municipal fue «coautor del informe en el que descalificó el PRI del Rico Pérez, propuesto por la empresa del constructor Enrique Ortiz, Aligestión, proponiendo su desestimación». El documento consideraba «irregular plantear esta actuación urbanística al margen del Plan General de Ordenación Urbana», sostiene Pavón en el comunicado remitido ayer. Beltrá fue uno de los técnicos citados a declarar como testigos en la investigación por el presunto amaño del Plan General en diciembre de 2013.