Las Diputaciones de Alicante y Castellón han rechazado participar en el programa de ayudas para los libros de texto propuesto hoy por el president de la Generalitat, Ximo Puig, por haber sido elaborado y anunciado sin consultarlo antes con las administraciones a las que se pretende implicar en su financiación.

Las diputaciones de Alicante y Castellón, ambas gobernadas por el PP, han emitido un comunicado conjunto en el que acusan al jefe del Consell, el socialista Ximo Puig, de romper el diálogo con estas instituciones con el anuncio unilateral del programa de ayudas a los libros de texto.

De esta manera, consideran que, con esta actuación, Puig ha "roto el diálogo con las instituciones provinciales" ya que se trata de una medida que atenta contra la autonomía de los gobiernos provinciales.

Las corporaciones provinciales de Alicante y Castellón han indicado que no permitirán que se intervenga de manera unilateral en el presupuesto y en los gastos de las diputaciones porque la legislación deja bien claro que tienen competencias propias y que se debe respetar su autonomía.

Consideran, asimismo, que lo que pretende la Generalitat es "gobernar con el presupuesto de las diputaciones", según la nota.

Por el contrario, ambas instituciones defienden que las decisiones se consensúen sin imposiciones, y han recordado que ésta es la segunda decisión que afecta a estos organismos que toma el presidente de la Generalitat sin ni siquiera haber contactado con sus respectivos presidentes.

En este sentido, han recordado que el pasado viernes se conoció la decisión de expulsar de los consejos de administración de las autoridades portuarias a ambos gobiernos provinciales en "una clara muestra de falta de talante y diálogo".

Desde las diputaciones de Alicante y Castellón se han preguntado "dónde quedan las palabras" que Puig pronunció en su debate de investidura, cuando se comprometió a liderar el diálogo y entendimiento "sin exclusiones y entre todos".

Para las diputaciones de Alicante y Castellón, el president de la Generalitat ha decidido romper el dialogo pese a que "ese no es el espíritu de coordinación y colaboración entre administraciones que se acordó en la reunión que los presidentes de las tres diputaciones mantuvieron con el presidente de la Generalitat hace sólo un mes, el pasado 29 de julio".

"Desde las Diputaciones de Alicante y Castellón se ha reiterado su disposición a colaborar y coordinar actuaciones en aras de ayudar a paliar las carencias y mejorar la calidad de vida de nuestros vecinos, pero también advierten que no encontrarán respaldo en estas instituciones cuando lo que pretendan es instrumentalizarlas para pagar sus invitaciones", ha concluido el comunicado.