El delegado del Gobierno en la Comunidad Valenciana, Juan Carlos Moragues, afirmó ayer que «no puede ser que se le dé una tarjeta sanitaria a un inmigrante ilegal y no a un europeo», y ha abogado por consensuar un modelo sanitario con todas las comunidades. Moragues, que fue preguntado por unas recientes declaraciones del secretario general de Sanidad, Rubén Moreno, insistió en que «todas las personas tienen derechos» y que «en ningún caso» se ha puesto en duda la asistencia sanitaria a estas personas, sino que «es un compromiso del Gobierno de España y de todas las comunidades autónomas». «El ministro de Sanidad ha expresado su voluntad de consensuar el modelo de gestión sanitaria que se presta a estas personas, partiendo de la idea de que no puede haber discriminación entre extranjeros legales, ilegales o comunitarios», añadió.