Ante la situación de sequía que afecta a la pinada del Benacantil, desde la Concejalía de Medio Ambiente acordaron ayer reforzar el riego manual en las zonas de difícil acceso e instalar un sistema automático en la zona media y baja del monte. Se trata de una medida de urgencia a la que le seguirán otras a medio plazo, indicó el concejal del área, Víctor Domínguez, quien reveló su intención de comenzar a repoblar la parte alta del monte a partir de octubre con especies más resistentes, entre las que citó el palmito, el algarrobo, el acebuche, el ciprés o los arbustos. Indicó que la pretensión no es talar los pinos, pero sí ir repoblando poco a poco la zona alta.

Domínguez indicó que muchos de los pinos se plantaron en una zona rocosa y con mucha pendiente que dificulta el riego y agrava la situación en momentos de sequía. Como han puesto de relieve vecinos y ecologistas, el concejal admitió que hay muchos pinos en malas condiciones, a los que no se puede dar una solución definitiva. Por el momento, se ha optado por reforzar el riego manual, con especial atención a la zona alta, y la instalación de un sistema automático en las zonas más accesibles que permita regar los ejemplares cuando lo precisen. Sobre el tomicus (escarabajo perforador del pino) aseguró que está «muy controlado».

En cuanto a la Serra Grossa destacó que también se ha reforzado la frecuencia del riego manual para paliar los efectos de la sequía.