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El PP deja una deuda de más de 479 millones en los grandes municipios que ha perdido en la provincia

El socialista Gabriel Echávarri ha heredado una carga financiera de 147,3 millones en Alicante, mientras el ilicitano Carlos González tendrá que afrontar un endeudamiento de 127,4 millones

Los nuevos alcaldes de Elche y Alicante, Carlos González y Gabriel Echávarri. JOSE NAVARRO

Limitados por la deuda. Así es como se han encontrado los nuevos alcaldes de los grandes municipios alicantinos tras el 24-M. El batacazo que sufrió el PP en las pasadas elecciones le ha privado de revalidar la vara de mando en 14 localidades de más de 20.000 habitantes. Y ahora, con los nuevos primeros ediles asentados ya en el cargo, se han topado con una cruda realidad: el elevado endeudamiento de sus consistorios. Ni más ni menos que 479 millones de herencia.

El mayor volumen de carga lo arrastra la capital. De acuerdo con los últimos datos publicados por el Ministerio de Hacienda, Alicante finiquitó el ejercicio de 2014 con una deuda de 147,318 millones de euros. Esa cuantía ha acortado el margen de maniobra del nuevo equipo de gobierno -PSOE, Guanyar y Compromís-, que se ha topado con que los Presupuestos de este año, aprobados por la anterior corporación, destinan 25,8 millones a amortizar deuda, tal y como consta en la web del Ayuntamiento.

La segunda localidad con más carga financiera es Elche. Ahora bien, el gobierno de Mercedes Alonso consiguió amortizar durante el mandato hasta 20 millones de euros. Cuando el PP accedió a la Alcaldía en 2011 se encontró con que la ciudad debía a las entidades financieras 147,4 millones. Al cierre de 2014, el último ejercicio con los populares al frente del consistorio, esa cifra había caído hasta los 127 millones. Ahora, con el socialista Carlos González en la Alcaldía gracias al apoyo de Compromís e Ilicitanos por Elche, la nueva corporación destinará a lo largo de este año 18,3 millones de su presupuesto a rebajar su endeudamiento.

La tercera gran población que ha perdido el PP y que más carga arrastra es Torrevieja. Pese a ser el partido más votado, un acuerdo a cinco bandas apartó al hoy vicepresidente primero de la Diputación, Eduardo Dolón, de revalidar el cargo. Pues bien, el nuevo primer edil, José Manuel Dolón (Los Verdes) ha heredado una deuda de 62,9 millones, prácticamente la misma que tenía la localidad salinera en 2011.

El que se ha encontrado con unas arcas saneadas ha sido el nuevo presidente de la Diputación, César Sánchez. Cuando Luisa Pastor asumió el timón de la institución provincial Joaquín Ripoll había dejado una carga de 115,4 millones. Ahora, la previsión es que el contador quede a cero cuando se finiquite 2015.

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