La situación en el transporte nocturno metropolitano de Alicante se ha agravado este fin de semana con la supresión de más servicios, debido a la huelga que mantienen los maquinistas de Ferrocarrils de la Generalitat Valenciana (FGV). La convocatoria de paros parciales ha supuesto la cancelación de 11 circulaciones en las diversas líneas del TRAM tanto la noche del viernes como la de ayer, a partir de las 21.30 horas, un hecho que se ha sumado a la ausencia de servicio durante la madrugada, que viene produciéndose durante todo el verano por primera vez desde 1988. Y, mientras tanto, se da la paradoja de que FGV ha comenzado a prestar un servicio nocturno de trenes entre Benidorm, Altea y Dénia, con el nombre comercial de «El Mussol de les Marines».

Llama enormemente la atención la puesta en marcha de los trenes nocturnos desde Benidorm hacia el norte, cuando en el entorno de Alicante se optó por suprimirlos de un plumazo ante la exigencia de los trabajadores de FGV de mejorar sus condiciones laborales en horario nocturno, sin mantener servicio alguno. La situación se ha unido a la huelga de los empleados de La Alcoyana, concesionaria de los autobuses metropolitanos, que también ha reducido al mínimo este transporte por las noches. La huelga en FGV se ha extendido este fin de semana, coincidiendo con la festividad del 15 de agosto, a las últimas horas del servicio «diurno» de trenes y tranvías, lo que ha restado aún más opciones de transporte público a los usuarios de Alicante y su entorno. En este caso, al tratarse de paros en los trenes habituales -el «Tramnochador» no dejaba de ser una circulación especial-, sí se han fijado servicios mínimos, pero tanto viernes como sábado la frecuencia de paso se redujo a prácticamente una hora en todas las líneas desde las 21.30 hasta la finalización del servicio.

Sorprende un tanto más esta situación si se tiene en cuenta que, ayer mismo, la propia Generalitat elogió el masivo uso del TRAM a través de un comunicado, coincidiendo con el duodécimo aniversario de la puesta en marcha del servicio tranviario entre Alicante y El Campello. Según esta nota, durante el mes de julio 1.025.812 pasajeros utilizaron la red metropolitana. La línea más usada volvió a ser la 2, que comunica la capital y San Vicente del Raspeig, seguida muy de cerca por la 1, que llega a Benidorm. En lo que va de año se acumulan 6.104.027 viajeros, con un incremento del 3,73% en relación al mismo periodo de 2014, según la misma fuente.

Los servicios nocturnos entre Alicante y Benidorm, los fines de semana de verano, habían tenido también un notable uso desde su implantación en 1988, y habían sido una alternativa atractiva a los desplazamientos en coche. Sin embargo, parece ya claro que este año no habrá circulaciones de este tipo. Mejor suerte tendrán, durante las próximas semanas, quienes quieran desplazarse en las noches de viernes y sábado entre Benidorm y Altea -hasta el apeadero de Garganes, en concreto-, ya que circularán seis trenes por sentido entre estas localidades desde las 22.30 hasta las 5.30 horas. Uno de los trenes sigue su recorrido desde el apeadero alteano de Garganes hasta Dénia, pero regresa de inmediato a Benidorm, con lo cual la repercusión del servicio en la Marina Alta será previsiblemente mínima.