El presidente del comité de empresa de La Alcoyana, Javier Ramírez, criticó ayer la postura de la Conselleria de Obras Públicas de echar «balones fuera» en la huelga que mantiene la plantilla, y que ha supuesto que sólo funcione cada fin de semana una línea nocturna de autobús metropolitano. Estos dos días, la que ha circulado ha sido la 21N, que enlaza Alicante y El Campello. Ramírez exigió que la Generalitat «ponga el mismo dinero que el año pasado» en el servicio metropolitano de autobuses, tal y como se acordó, según expuso, con el anterior gobierno autonómico al pasar a la contrata municipal la línea 25 -de Alicante a Villafranqueza, ahora línea 13- y quedar dos autobuses libres. Con ellos, añadió, deberían reforzarse las líneas a San Vicente y a Sant Joan y Mutxamel. A. T.