Series de televisión como CSI o Dexter han despertado fascinación por la profesión de forense. La realidad no dista mucho de la ficción. Esta enigmática rama de la medicina suele provocar rechazo y curiosidad a partes iguales en una sociedad que trata la muerte como tema tabú.

¿Cuál es el día a día de un forense? ¿Es como la gente imagina?. El médico forense Salvador Giner nos dá las respuestas y nos acerca a este curioso mundo que la gran mayoría desconoce.

Con unas 1000 autopsias al año, cuatro o cinco por día, la rutina de estos médicos consiste en abrir cadáveres y extraer órganos para su posterior estudio. El objetivo principal es analizar la causa de la muerte en los casos judiciales, en los que puede haber algún tipo de incidencia o agresión externa en el fallecido.

El médico agradece al profesor que le incitó a adentrarse en este trabajo. "Disfruto porque si no lo hago día a día, al final sería un amargado", asegura. Además, "cuando hay homicidios, suicidios o accidentes que se salen de la norma es cuando me gusta más esta profesión", concluye.