En un balance de los primeros treinta días de gestión, el conseller de Educación, Investigación, Cultura y Deporte, Vicent Marzà, asegura que se han emprendido medidas de emergencia para «minimizar los efectos negativos» de la Lomce para el curso 2015-2016 y favorecer la «calidad educativa» como la modificación del calendario escolar, la recuperación de las clases de 60 minutos o la ampliación de las horas de las asignaturas troncales a Bachillerato. Y recalca que se ha hecho escuchando a toda la comunidad educativa.

Marzà asegura que han cambiado «un chip impuesto desde hace 20 años» con gobiernos del PP. Y añade que en educación e investigación la gestión «se basa en criterios pedagógicos».

Asimismo, se han reabierto 17 unidades públicas de Infantil y Primaria para el próximo curso como medida de urgencia educativa y se ha adoptado el compromiso de hacer una planificación lógica y con criterios pedagógico de cara al arreglo escolar para el curso 2015-2016. En cuanto a la Formación Profesional y Ciclos formativos el resultado ha sido la creación de un total de 149 unidades y grupos en la red pública.

Impera la lógica

El conseller destaca haber aplicado la lógica en cuestiones como el transporte escolar y los comedores escolares. Se asignarán becas de transporte escolar siguiendo la pauta de los tres kilómetros, pero no en línea recta. Los comedores escolares, por primera vez, se abrirán el 10 de septiembre.

Marzà apunta el estar trabajando en una mejor coordinación con las administraciones estatales y europeas para la asignación de becas de investigación y señala que se han emprendido los primeros contactos con las universidades públicas valencianas para resolver las principales cuestiones en materia de financiación y calidad educativa universitaria.