El alcalde de Alicante, el socialista Gabriel Echávarri, ha afirmado hoy que, por parte de su partido, no hay un cisma en el actual gobierno tripartito municipal a causa del nombramiento de la mujer del exsenador del PSOE Ángel Franco como personal de confianza en la Concejalía de Recursos Humanos.

En declaraciones a Efe, Echávarri ha revelado que los socios del PSOE en el ejecutivo local de Alicante, Guanyar Alacant y Compromís, le habían expresado su "malestar" por ese nombramiento.

El exsenador y exconcejal de Alicante Ángel Franco pidió el año pasado su suspensión temporal de militancia del PSPV-PSOE hasta que se clarificaran las informaciones aparecidas entonces en prensa en las que se le relacionaba con la supuesta trama del plan urbanístico de Rabasa.

Echávarri ha explicado que la designación de cargos de confianza es un tema estrictamente interno de cada grupo municipal -"está dentro" de su "autonomía" y "soberanía"- y ha añadido que el nombramiento de la mujer de Ángel Franco, de la que ha asegurado que posee un amplio bagaje profesional, es una decisión del PSOE al tratarse de la elección de una persona de confianza del grupo socialista.

"Es una compañera del PSOE y experta en Recursos Humanos. Por consiguiente, el partido ha considerado que es la persona idónea para apoyar al concejal de Recursos Humanos", ha dicho el regidor, quien ha expuesto que, además, la mujer de Ángel Franco "ya trabajó en el Ayuntamiento de Alicante" en la época en la que el socialista Ángel Luna era alcalde.

Echávarri ha incidido en que, por parte del PSOE, este nombramiento no ha provocado un cisma en el actual gobierno tripartito municipal.

"Si en una ciudad con 35.000 parados y las desigualdades sociales que hay se produce un cisma de gobierno por un nombramiento de un asesor, creo que nos estamos perdiendo en los detalles", ha considerado.

Ha argumentado que el PSOE ha sido elegido, junto con otras formaciones políticas (Guanyar Alacant y Compromís), para "intentar mejorar las condiciones de vida de los alicantinos, no para perdernos en detalles".

"¿Qué hay un cisma de gobierno por ese nombramiento? Pienso que no. Por parte del PSOE, no", ha remarcado Echávarri.

Ha reseñado que rubricará como alcalde cuando vengan las designaciones del personal de confianza que propongan las otras formaciones políticas con representación municipal.

"Entiendo que cada uno (grupo municipal) habrá hecho su proceso interno y habrá considerado que son los más válidos y los que más aportarán para cada una de las áreas, y para los partidos políticos de la oposición", ha agregado.

El alcalde ha subrayado: "No soy nadie para decir que alguien aporta más o aporta menos si es elegido por un partido. Entra dentro de la soberanía de cada partido el decir cuáles son las personas apropiadas, y el PSOE ha entendido que todos los que han sido nombrados son los que más pueden aportar, y a partir de ahí, no hay nada más".

Ha aclarado que el nombramiento de la mujer de Ángel Franco como personal de confianza no es aún oficial, pues debe ser ratificado por el pleno.

"Lo que se ha firmado es el decreto de nombramiento hasta que lo ratifique un pleno", cuya fecha de celebración "está todavía sin fijar", ha indicado.

Echávarri ha expuesto como principio que creen él y los socialistas que "criminalizar o condenar a una mujer por lo que haya podido o no haya podido hacer su marido es algo" que rechazan porque es "una de las máximas expresiones del machismo". "Con eso no digo que nadie sea machista", ha apostillado.

Para el alcalde, es "tremendamente injusto extender una eventual responsabilidad, de no sé muy bien qué, a personas que no tienen nada que ver con nada".

Ha revelado que había manifestado a sus socios de gobierno que era "tremendamente injusto" que "juzgaran" a la mujer de Ángel Franco "por lo que pueda ser o no pueda ser él, por las manías o no manías que le tengan".

"He usado la palabra machista en la reunión de hoy" de la junta de gobierno local, ha señalado Echávarri.

"Estamos condenando a todo un entorno por una figura central; no lo veo justo", porque "no estamos aquí para vetar a nadie", y, "por mí, no hay ninguna crisis; no considero que eso (el referido nombramiento) sea" para abrirla, ha manifestado.