El Congreso aprobó ayer la reforma que permitirá la inscripción de los nacimientos directamente desde el hospital sin necesidad de que los padres tengan que desplazarse al Registro Civil, a partir del próximo 15 de octubre. La reforma establece la tramitación electrónica de los nacimientos y defunciones desde los centros sanitarios, por lo que los padres y familiares ya no tendrán que desplazarse al Registro Civil para realizar ambos trámites. Para la inscripción de los recién nacidos, los centros sanitarios deberán remitir toda la documentación al Registro Civil en 72 horas desde el nacimiento y los facultativos serán los responsables de identificar al bebé y certificar su filiación. Los padres, junto a los facultativos que hayan asistido al parto, firmarán el formulario de declaración al que se incorporará el acreditativo del nacimiento.