Renfe, la operadora pública que gestiona el AVE con Madrid ha creado una nueva compañía de alquiler de trenes a terceros operadores con un parque de 51 trenes, 19 de ellos de Alta Velocidad, otros doce de ancho variable, 49 locomotoras y 1.173 vagones para transporte de distintos tipo de mercancías. Una flota que pondrá en servicio, previo pago del operador privado, que se haga con el concurso para explotar durante 7 años a partir del otoño de 2016 la línea de alta velocidad Alicante-Madrid.
Todo correcto hasta que esta semana la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia ha anunciado que considera necesario que Renfe privatice o segregue totalmente su nueva filial de alquiler de trenes con el fin de favorecer la próxima entrada de nuevos operadores privados que compitan con la compañía ferroviaria pública. El superregulador pretende con esta medida contrarrestar las ventajas con que cuenta Renfe como operador ya establecido y evitar que pueda llevar a cabo comportamientos tendentes a obstaculizar la entrada de potenciales operadores.
El Ministerio de Fomento está a la espera de obtener el visto bueno del Consejo de Estado a los pliegos para sacar a concurso el primer título habilitante. La compañía que lo consiga podrá entrar a competir con Renfe en tráfico de viajeros por tren en el corredor AVE a la Comunidad Valenciana y Murcia. Entre las compañías que ya han conseguido licencia de operador ferroviario y están interesadas en entrar en este mercado, figuran las constructoras ACS, Acciona, Ferrovial y Comsa, las compañías de transporte en autobús Alsa e Interbús, el grupo Planeta, a través de su sociedad Veloi Rail, el grupo Globalia y la firma andaluza Eco Rail. El grupo alicantino Vectalia, propiedad de la familia Arias, está interesado en participar en la explotación asociándose con alguna de las grandes compañías.
Por otro lado, la Comisión estima que Renfe debería estar obligada a informar de forma previa a su lanzamiento comercial de las tarifas y precios de los billetes que prevé aplicar en los corredores AVE en los que entre competencia con el operador privado. De esta forma, según el superregulador «se podrían valorar desde el punto de vista de la competencia sus efectos sobre los viajeros y sobre el nuevo operador».
Un año de retraso
La entrada de un operador privado que compita con Renfe en el corredor Alicante-Madrid, donde según Fomento hay capacidad para que circulen un 70% más de trenes, es uno de los retos de la ministra de Fomento, Ana Pastor, desde que tomó las riendas de la cartera que gestiona las infraestructuras estatales. Sin embargo, sus deseos han chocado con la realidad económica y la operación acumula ya un año de retraso, debido a las reticencias de las grandes empresas a asumir el canon de circulación que tienen que abonar al Administrador de Infraestructuras Ferroviarias (Adif).
Éxito sin precedentes
El éxito que ha cosechado la línea de alta velocidad entre Alicante y Madrid desde su inauguración hace casi dos años -próximo 18 de junio- ha hecho posible que Renfe haya transportado ya cerca de 2,5 millones de pasajeros, lo que ha convertido al corredor en el de mayor porcentaje de crecimiento de España. Entre enero y abril de este año por el corredor viajaron 571.000 pasajeros, a razón de 142.750 mensuales. Cifras muy superiores, por ejemplo, al mismo cuatrimestre de 2013 (sin AVE), cuando se movieron 347.000 pasajeros, 86.700 al mes. La demanda del AVE ha crecido de forma constante y la ocupación media se acerca al 80%. El servicio AVE entre Madrid y Alicante, punto a punto, supera en determinados días los 8.000 viajeros. Los jueves y los viernes son los días de mayor demanda. Desde que se inició el servicio han circulado entre Madrid y Alicante cerca de 6.000 trenes de Alta Velocidad con un índice de puntualidad del 97%.
La conexión Madrid-Valencia registra 6,5 millones de pasajeros al año, de los cuales 1,78 millones son del tren, 264.000 del avión, 3,9 millones en coches particulares y 580.000 viajeros se mueven en autobús. La cuota de mercado del ferrocarril es del 27,4 %.
En un principio, el operador privado que se adjudique la gestión de la línea del AVE entre Alicante y la Comunidad Valenciana, también lo hará con la alta velocidad a Murcia y, por lo tanto, con la conexión directa Alicante-Elche, que el Ministerio de Fomento quiere que arranque en el primer semestre de 2016. El operador decidirá frecuencias y precios para sus servicios.
