En una zona noble de Alicante, junto al Teatro Principal, una nueva terraza pretende llenar un vacío en el segmento de turismo de lujo. «Alicante es turística y como empresario no entiendo que no haya sitios de calidad excepcional, no se han ampliado las miras a un turismo de lujo», advierte el director gerente del Teatro Bistrot Terrace, Carlos Bosch, quien se muestra orgulloso por la apuesta de dotar a la ciudad de «un modelo de terraza distinto». Su filosofía es la de implantar un proyecto que destaque «porque la oferta está descompensada» y remarca el hecho de que en la terraza se consumen bebidas de lujo como el champán que no se acostumbran a servir en las terrazas alicantinas. Para ello, también destaca la profesionalidad del personal compuesto por doce personas: «hay que dar un servicio de calidad con personal cualificado» y añade «estos son negocios que recuperan la ciudad». «A Alicante le queda mucho por hacer», advierte el director gerente que lo es a su vez de otro modelo de éxito, el restaurante El Portal, en Gabriel Miró. Y a la vez, pone en valor el hecho de que la nueva terraza ha recuperado «una zona olvidada, esa zona estaba sucia, denostada, y ahora le hemos puesto una etiqueta».
