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Un brote de escarlatina obliga a examinar a 160 niños

Salud Pública aplicará hoy un test rápido a los menores para buscar nuevos casos de la enfermedad

Un brote de escarlatina obliga a examinar a 160 niños

Seis casos de escarlatina en un colegio de Alicante en pocos días ha obligado a Sanidad a decidir el examen de todos los escolares de Infantil de 3 a 5 años, 158 matriculados en el Costa Blanca, para medicar con antibióticos a los que así lo precisen en función de sus síntomas.

El centro se puso en contacto con Sanidad en cuanto tuvo conocimiento del segundo caso, a través de los respectivos padres, y pese a que se le indicó que no debía actuar, en pocos días los casos se triplicaron, por lo que ya se ha cursado información a las familias para obtener su permiso y examinar a todos los matriculados en Infantil. Los facultativos tomarán muestras y actuarán según el protocolo previsto para evitar nuevos casos. En ese sentido, desde la Conselleria de Sanidad precisaron que durante la jornada de hoy se realizarán test rápidos a los menores «para localizar casos aún no identificados» y aplicar el tratamiento. Este consiste en la administración de dos clases de antibióticos, amoxicilina y penicilina, según puntualizó ayer el pediatra José Pastor.

A su vez, la Concejalía de Educación solicitó un servicio extraordinario de limpieza de las aulas y estancias de los niños de Infantil, que se llevó a cabo la tarde del lunes de forma metódica. «Juguetes, peluches, lápices, material escolar en general, ropa... todo ha sido objeto de desinfección», aseguran en el colegio.

La escarlatina se contagia por las vías respiratorias y entre niños tan pequeños es más común porque chupan todos los objetos y se los pasan de unos a otros. «Estamos teniendo especial cuidado en eso estos días», añadieron.

Aunque esta dolencia es muy contagiosa, el germen que la provoca, el estreptococo, «es muy sensible al antibiótico y jamás ha producido resistencias», añade Pastor. Por lo tanto, 24 o 36 horas después de haber iniciado el tratamiento, «este se negativiza». La escarlatina provoca fiebre y erupciones en la piel, que adquiere una apariencia como de papel de lija y un color rojo intenso. Aunque no es peligrosa, es necesario administrar tratamiento antibiótico a los menores que se sospecha puedan padecerla, «ya que en determinados niños con predisposición puede producir fiebre reumática y afecciones de riñón». Los síntomas de la escarlatina son fiebre y dolor de garganta. En los últimos años son normales los brotes de esta enfermedad para la que no existe una vacuna.

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