Ante la oposición en bloque de los colectivos comerciales, sociales y económicos así como del propio Ayuntamiento de Alicante al plan del macrocentro comercial en Rabasa tal cual está planteado, desde la empresa promotora Alicante Avanza, participada por Enrique Ortiz dan un paso más en su propuesta inicial de tratar de llegar a «un punto de encuentro» y se muestran dispuestos a realizar una modificación integral de la Actuación Territorial Estratégica en base a las reivindicaciones de los diferentes colectivos, pero siempre que los cambios exigidos por las diferentes administraciones sigan haciendo viable el plan y que Ikea los acepte. «Sin Ikea, no hay proyecto», advierten.
La mercantil sostiene que la posición de la multinacional será clave, pero no llegará, posiblemente, hasta después de las elecciones. Unos comicios locales y autonómicos que también, admiten, serán determinantes. Y es que será el nuevo Consell el que tendrá en sus manos la decisión sobre el proyecto. El ejecutivo resultante también encontrará sobre la mesa las alegaciones e informes del Ayuntamiento, del comercio y de otros colectivos exigiendo que el proyecto se reformule de manera integral o, de lo contrario, no se tramite como Actuación Estratégica. Entre otras cuestiones, la entidad local y el comercio plantean que la superficie comercial del proyecto resulta desmesurada y exigen una modificación integral del proyecto para dar protagonismo al parque empresarial en detrimento del macrocentro. La mercantil rechaza retirar el ATE, pero asegura estar abierta a cualquier cambio que conduzca al consenso, incluso a una reestructuración de las parcelas y de los usos, pero siempre que Ikea lo acepte y sea viable.
Desde Alicante Avanza sostienen que fue el propio Ayuntamiento el que mostró su conformidad al modelo de negocio propuesto por Ikea cuando se proyectaba en el marco del Plan Rabasa de instalarse junto a una superficie comercial de 125.000 metros cuadrados edificables. Confirman que la mercantil mantiene su apuesta por Alicante, pero desde la promotora aseguran que la multinacional sigue sin pronunciarse sobre si aceptaría el cambio de modelo que ahora plantea el Ayuntamiento, con la presencia de iconos frente a un modelo tradicional de centro comercial. La mercantil asevera que la multinacional se muestra prudente, sin manifestarse por ahora.
Alicante Avanza incide en que está abierta a negociar con los diferentes colectivos (seguirá su ronda con comercio, Universidad y otros colectivos) incluso una vez finalizado el periodo de exposición pública para tratar de sacar adelante el proyecto con consenso, conscientes de la dificultad de hacerlo con el rechazo generalizado al actual plan. «Acabamos de empezar», indican. La empresa incide en que está dispuesta a «racionalizar» el proyecto y confirma que están en la búsqueda de empresas que puedan servir de locomotora al parque empresarial, así como su intención de generar sinergias con la Universidad.
En cuanto al Plan Rabasa, mantienen que no desistirán de los recursos contra su anulación hasta la aprobación definitiva del ATE.
