No se libran ni públicos ni concertados. Conseguir 30 alumnos por aula empieza a ser complicado porque el progresivo descenso de la natalidad, aunque ligero, no acompaña, y sobre los colegios pende una espada de Damocles: el cierre en el caso de los públicos y la pérdida del concierto en los otros.
Así las cosas, a la generalización de las jornadas de puertas abiertas en los colegios, para tratar de atraer a las familias que deben decidir en los próximos días el centro que eligen para sus hijos, empiezan a sumarse estrategias más concretas pero dirigidas, en cualquier caso, a captar la atención y beneplácito de los padres.
Este año las estrellas del marketing impulsado especialmente desde los centros concertados -pero no solo- se llaman inglés, nuevas tecnologías e inteligencia emocional.
«El objetivo no tiene que ser llenar las aulas por un criterio de rentabilidad», se defienden los titulares consultados en la enseñanza concertada. Aún así, las familias son objeto de unas campañas de publicidad que no se habían dado hasta ahora con el nivel de intensidad que alcanzan actualmente.
El comedor, clave
Y es que la crisis no ha dejado títere con cabeza y, como apunta desde la Federación provincial de padres de alumnos »Escuela y Familia», Julia María Llopis, -presidenta a su vez de la Confederación Concapa autonómica-, el descenso de usuarios en los comedores escolares de los centros concertados se ha hecho notar.
Pese a que también en estos colegios tratan de cubrir necesidades extremas en este sentido -y cuando se conoce a la familia y se constata la necesidad se le cubre el gasto, asegura Llopis-, es un hecho que buena parte de los beneficios que logran estas empresas proceden precisamente del servicio del comedor escolar, que «ha ido a menos», como constatan.
Por este mismo motivo la enseñanza concertada reclama más becas de comedor, petición que choca frontalmente con el colectivo que representa mayoritariamente a los padres de los centros públicos en la Comunidad, la Confederación «Gonzalo Anaya», que rechaza de plano la ampliación de estas ayudas mientras no se cubran por completo las necesidades de las familias que escolarizan a sus hijos en la pública.
Y es que, al margen del comedor, los concertados juegan con algunas ventajas que aprovechan para captar alumnos de cara al proceso de admisión que comienza el próximo 8 de mayo.
«Por una parte 0frecemos a los profesores cursos de formación de inglés durante todo el año para convertirlos en bilingües y reforzar la práctica del idioma en todos los niveles y, por otra, vamos generando la cultura en el centro de hablar en lengua inglesa, sin limitarlo al aula». En este colegio aseguran que fomentan los saludos y comentarios entre alumnos y profesores en inglés en los pasillos y durante el turno de comedor «para que todos se familiaricen».
Son pautas que sin duda atraen a las familias a la hora de elegir colegio, toda vez que la Conselleria de Educación ha creado en los últimos años la falsa expectativa de la generalización del aprendizaje del inglés, que no se traduce en la práctica real porque el nivel de formación previa de los docentes no se ha podido generalizar todavía.
A la oferta del inglés se suma la dotación en las aulas de las últimas tecnologías, especialmente tablets. La conselleria dotó tan sólo unos pocos centros públicos a título experimental gravando el coste a las familias, y los centros concertados se apuntan a favorecerlo como reclamo de la matrícula. Al menos así lo contemplan varios de ellos en sus páginas web, convertidas en el primer escaparate al que acuden ya las familias para interesarse sobre los diferentes servicios que ofrecen unos u otros centros.
Conexión
«Apostamos por las nuevas tecnologías, pizarras digitales en todas la aulas, conexión con internet. Hay que abrir los centros a la sociedad y de esta forma las familias vendrán a nosotros», apuntan en otro colegio.
El propio Ministerio de Educación anunció hace un mes la puesta en marcha del proyecto «Escuelas conectadas», que permitirá dotar a 16.500 centros de todo el país de banda ancha ultrarrápida a partir del año que viene.
En la Comunidad está previsto que el programa beneficie a 1.300 centros educativos, colegios e institutos, y a más de 587.000 alumnos, según informan desde Educación.
Las mismas fuentes aseguran que se trata de «prestar especial atención a los centros que, por razones de su ubicación, encuentran mayores dificultades para acceder a estos nuevos servicios a una velocidad de 100 megabits por segundo». Mediante la firma de convenios, está previsto dotarles de redes internas wifi y de equipamiento en general: routers, antenas. «Profesores, alumnos y familias podrán utilizar las tecnologías y los contenidos digitales como herramienta educativa básica, garantizando la equidad en el acceso a dichas tecnologías por parte del alumnado», apuntan.
La medida, destinada a los centros públicos, pone a su vez las pilas a los concertados para captar a los alumnos hacia sus aulas de antemano.
Coaching en el colegio
Otro de los atractivos más en boga a la hora de escoger centro es la inclusión en la enseñanza de la inteligencia emocional. Los centros lo aportan como un extra añadido a una educación reglada en contenidos de la que no pueden salirse, pero que adolece de unos valores que los padres también demandan para sus hijos.
«Contratamos un coaching que trabaja con los padres para que compartan los valores con sus hijos. Las habilidades sociales para poder enfrentarse a la frustración son tan importantes para nosotros como los contenidos pedagógicos, y las familias lo valoran mucho cuando buscan colegio», destacan en otro de los públicos.
El viernes que viene, día 8 de mayo, ya se puede presentar la solicitud de admisión en el centro que se desee. El plazo acaba el jueves 14, apenas cinco días.
