A la dirección autonómica de Podemos le preocupa, y mucho, la fractura interna que vive el partido en Alicantefractura interna . Tanto, que ha decidido enviar a un mediador a la ciudad para intentar reconducir la deriva en la que ha entrado la formación. La cita será el próximo lunes. Ese día, la responsable de Educación de la ejecutiva nacional, la valenciana Sandra Mínguez, se desplazará hasta la capital para tratar de poner paz entre el Consejo Ciudadano y el sector crítico con la dirección local.
Los desencuentros entre unos y otros han sido constantes desde que se celebraron las primarias para elegir a los cargos que iban a asumir el timón orgánico de Podemos en la ciudad. La votación ya evidenció la división interna. Jesús Bustos consiguió la victoria con 628 votos, un 52,68% del total. Su principal rival, Nerea Belmonte, se quedó relativamente cerca: obtuvo 514 sufragios, el 43,12%. El tercero de los aspirantes, Alejandro Martínez (que ahora se ha presentado también a las primarias para encabezar la lista autonómica para la Presidencia del Consell), logró sólo 50 apoyos, el 4,19%.
A partir de ese momento llegaron los conflictos. Desautorización del Consejo a Belmonte por acudir a un acto de Guanyem en San Vicente, la presentación de una denuncia contra Ángel Luna por escribir opiniones en este diario desde su condición de adjunto primero al Síndic de Greuges, el presunto nepotismo en la confección de la candidatura «oficialista» para las primarias autonómicas... Las críticas hacia la dirección local del partido han sido múltiples. Pero sin duda, el episodio que más ha enervado los ánimos de las bases ha sido la supuesta falta de interés de la ejecutiva local en la confluencia con Alacant en Comú (la marca que aglutina a EU, Podemos y otros colectivos ciudadanos).
Pese a que el Consejo ha reiterado que sí se ha implicado para concurrir con el colectivo a las elecciones locales del próximo 24 de mayo, las bases entienden que no. Y han justificado su postura con hechos. El primero, que el equipo de comunicación de Podemos en Alicante se saltó el mandato de la asamblea y no informó del proceso de primarias en Alacant en Comú. Además, nadie de la dirección local quiso confirmar, como se temen algunos afiliados, que se estaba impulsando un partido propio para presentarse a los comicios a la vez que se negociaba con el colectivo impulsado por EU. Uno de los miembros del Consejo, Miguel Ángel López Rojo, incluso inscribió la marca «Sí se puede Alicante» en la Oficina de Patentes.
La situación terminó de explotar hace dos semanas, cuando un grupo formado por 24 inscritos cargó con dureza contra la ejecutiva local. Los militantes censuraron el «escaso o nulo interés» del partido para confluir con Alacant en Comú y apuntaron directamente a Bustos. «Hacemos responsable de este desaguisado al Consejo Ciudadano, con su secretario general Jesús Bustos a la cabeza, por su inmovilismo, y por no realizar todos los esfuerzos posibles para empoderar a las gentes de Podemos», zanjaron.
