«¿Tienes una invitación para ir al cielo?» es el título del libro que ha venido a presentar al Club INFORMACIÓN. ¿Son sus memorias?

No es exactamente un libro de memorias. Explica lo que sucede cuando morimos, nos dice cómo prepararnos para el otro mundo e incluso explica cómo el otro mundo se acerca a nosotros.

¿De qué manera alguien del otro mundo contacta con nosotros?

Cuando alguien muere se muestra a nosotros de muchas maneras distintas, con un sonido, con una visión, incluso se puede mostrar como pisadas, como un olor o como un símbolo, pero vienen a nosotros porque quieren hacernos saber que no existe la muerte. La verdad es que todos vamos a morir y no podemos vivir en la tierra en paz hasta que no sepamos que la muerte no existe. La mayor parte de la agresión en el mundo, de la confusión, de la envidia es porque la gente no entiende el significado de la vida después de la muerte y tienen miedo de hecho a morir.

¿Por qué nos asusta tanto la muerte?

Porque no saben y, como no conocen, tienen miedo. También sienten miedo porque han escuchado cosas extrañas como el infierno eterno y que van a sufrir durante toda su vida y comienzan a pensar... De hecho, la mayor parte del suicidio está conectado con un miedo porque piensan que van a sufrir, sienten un miedo terrible y entonces deciden suicidarse.

¿Qué busca la gente que se acerca a usted?

Yo no digo cosas en el sentido de la fortuna. Cuando la gente se me acerca es porque quiere conocer algo del otro mundo, quiere sentirse bien escuchando que la vida continúa después de la muerte. La gente se acerca porque quiere comprender cómo tener una vida mejor. Muchas personas viven con estrés, confusión y ansiedad. Tenemos que ser conscientes de que hoy es el día en que tuvimos miedo del ayer. Pero la gente viene por muchas razones diferentes. El mundo espiritual quiere recordarnos que cada pensamiento, acción, palabra que decimos se queda grabada no sólo en el subconsciente, si no en el otro mundo y cuando morimos encaramos todo eso. Es importante no esconder nada. No te puedes imaginar cuántas personas viven dobles vidas. Quizás tienen un marido o una mujer y amores secretos en otro lugar. Nunca encuentran esa felicidad. Así que los espíritus nos vienen a recordar la necesidad de vivir una vida limpia y honesta.

¿Hay espíritus malos?

No. Hay almas perdidas, pero no espíritus malos. Igual que hay almas perdidas en la tierra, las hay en el cielo. En la tierra hay personas que roban, que hacen daño a otros, que no cuidan a sus hijos, a los niños. Son personas perdidas y cuando llegan al otro mundo se convierten en almas perdidas. Nadie nace como un alma perdida, un alma mala. Somos un alma que vivimos en un cuerpo y con una mente para poder funcionar y es la responsabilidad de cada uno la que tenemos que desarrollar.

¿Qué ve exactamente cuando contempla a una persona?

Veo muchas cosas, colores, luces, escucho a gente hablándome. Veo, escucho, siento... es como una sabiduría interna, lo sé. Es una sabiduría que nace de dentro de mi ser y la verdad es que todos nacemos con parte de estos dones, pero la mayor parte de la gente no saca el valor para usarlos, no se anima a hacerlo. Muchas personas incluso llegan a pensar que hay algo malo que pasa con ellos y se rebajan.

¿Tenemos el destino escrito?

Venimos a la tierra con esta misión, con este propósito, cómo lo usamos depende de que nos demos cuenta de cuál es esa misión y cuáles son esos dones con los que hemos nacido. Vamos a suponer que naces en una familia donde ha habido mucha tragedia, venimos a la tierra con todo lo necesario para hacer el cambio. Nuestro destino es vivir aquí y hacer algo positivo por la tierra y la humanidad. Si lo hacemos o no es responsabilidad de cada uno. Este es el tema principal de la reencarnación. Venimos al mundo con una memoria inconsciente muy fuerte y unas habilidades muy específicas y de alguna manera están conectadas con el pasado y nuestra herencia genética. Pero venimos al mundo con lo que necesitamos para vivir en la tierra.

Como persona creyente, ¿qué opina de que la religión se convierta en un motivo de guerra en medio mundo?

No es que me ponga triste cuando escucho esto sino cuando pienso por qué no se darán cuenta de que la guerra no es la respuesta. La pregunta es ¿qué nos llevamos cuando morimos? y la respuesta es simplemente nuestra alma, porque el cuerpo se disuelve y nuestra alma es la que continúa la vida eterna, es la que va a seguir viviendo. Lo que me preocupa es que muchas personas no son conscientes del propósito en la tierra. El mundo espiritual dice que es más difícil venir a la tierra que abandonarla, es más difícil nacer que morir.