«Este es el peor momento para nosotros. Lo aguantamos porque es sólo un mes al año». Las palabras de Isabel Rubio, pediatra en un centro de salud de Elche y presidenta de la Asociación de Pediatría Extrahospitalaria, resumen la intensa actividad que se está viviendo estos días en los centros de salud de la provincia, en especial durante la última semana, a consecuencia de la gripe.
La enfermedad ya ha alcanzado el nivel de epidemia -supera los 187 casos por 100.000 habitantes- y está afectando principalmente a niños de 5 a 14 años. Esto se traduce en un aumento generalizado de las consultas en Pediatría que en algunos centros de salud, por ejemplo en las ciudades de Alicante y Elche, llega a ser del 50%, lo que está obligando a los profesionales a reducir los tiempos que dedican a ver a cada niño.
En la ciudad de Alicante el aumento de consultas roza entre el 30 y el 50% en centros de salud como Parque Lo Morant, San Blas o Pla Hospital. En la zona de playas la situación era ayer más tranquila, una circunstancia que algunos pediatras consultados achacan «a que los padres suelen acudir a otro tipo de dispositivos sanitarios antes que al centro de salud». En las consultas más saturadas, los pediatras han tenido que recurrir a reducir los tiempos que dedican a los niños. «Generalmente dedicamos 10 minutos por niño. Si en estas semanas tenemos el doble de pacientes, los tiempos tienen que bajar a la mitad o incluso menos, porque hay días en los que ves tres veces más pacientes», explicaba ayer una pediatra del centro de salud Pla Hospital. Esta última semana cada facultativo está viendo una media de 40 ó 50 niños en una mañana o en una trade.
Sin embargo, la situación es especialmente grave en la ciudad de Elche, «donde se han notificado más casos de la enfermedad», según explicó ayer José Pastor, pediatra y presidente del Colegio de Médicos de Alicante. Los servicios de Urgencias de los hospitales ilicitanos y los centros de salud también están recibiendo una avalancha de visitas con pacientes con gripe y procesos respiratorios. Una situación que se constata en las largas de espera, como se vio ayer en el centro de salud de San Fermín, donde se atienden urgencias pediátricas.
La jefa de Pediatría del Hospital del Vinalopó, Simona Mas, constató que la gripe y los procesos respiratorios están colapsando los centros de salud obligando a los profesionales sanitarios a reducir el tiempo de consulta por paciente. De esta forma, se trata de absorber el volumen de visitas que en algunos centros se ha duplicado si se compara con el número de pacientes que reciben durante otros periodos del año.
Simona Mas indicó que «durante estos días estamos viendo muchas patologías tanto de gripe como de neumonías, bronquitis... ya que estamos en la época más conflictiva en este sentido».
Sobre el gran número de casos de gripe que se están registrando entre la población infantil, la jefa de Pediatría del Hospital de Vinalopó dijo que «es importante llevar mucho cuidado para evitar los contagios, llevando una higiene correcta en las manos, así como no llevar a los niños al colegio».
Aunque no se están dando complicaciones graves, los pediatras explican que este año la gripe provoca síntomas muy llamativos, como intenso dolor de cabeza, dolores musculares muy fuertes y trastornos digestivos. Las aulas de los colegios también se han visto afectadas por este virus, que ha provocado que en algunas clases esta semana hayan faltado hasta la mitad de los alumnos. Algunos directores han tenido además que enviar circulares a los padres para que no envíen a sus hijos convalecientes a clase para evitar contagios.
Pese a este pico asistencial registrado en la última semana, la Conselleria de Sanidad espera que la enfermedad llegue a su punto máximo la próxima semana, para comenzar a remitir el número de casos a mediados del mes de febrero. Desde el departamento de Manuel Llombart insisten en que este año la epidemia está siendo más leve que otros inviernos.
