Las principales organizaciones empresariales de la Comunidad Valenciana han exigido hoy la ejecución del proyecto del Corredor Mediterráneo en los plazos previstos, y advierten de que en caso contrario "se estará estrangulando a uno de los principales focos de riqueza del país".
Así lo ha manifestado el presidente de la Asociación Valenciana de Empresarios (AVE), Vicente Boluda, que ha comparecido en rueda de prensa junto a los representantes de Fepex, Martinavarro, ANECOOP, AVIA, de la Federación Agroalimentaria, y los profesores de la Universitat de València César Camisón y Josep Vicente Boira.
Boluda ha recordado que esta infraestructura fue aprobada por la Unión Europea y el Gobierno central, y que los empresarios aceptaron "de forma provisional" la solución del tercer carril.
Ha señalado asimismo que la ministra de Fomento, Ana Pastor, les dio "en repetidas ocasiones" su palabra de que el Corredor iba a estar en 2015, pero ha lamentado que "aunque prácticamente todo está licitado, las obras están prácticamente paradas".
Tampoco hay fecha, han asegurado, de la visita que la ministra se comprometió a hacer a la Comunitat para comprobar las obras del AVE que conectará Alicante, Valencia y Castellón.
"Lo más grave", ha apuntado Boluda, es que no hay dotación presupuestaria suficiente para concluir el Corredor en los plazos acordados.
Ello supondrá, ha advertido, "un impacto negativo para la economía valenciana y para España", y el "estrangulamiento" de uno los principales focos de riqueza del país".
Ha defendido asimismo que el Gobierno debe apostar por infraestructuras y estrategias "a largo plazo", y priorizar los proyectos de carácter "estratégico" y que "potencien nuestra economía".
El funcionamiento del Corredor hasta Castellón y Valencia en 2015 y hasta Alicante en 2016 es un objetivo "irrenunciable" para alcanzar un sistema territorial y logístico competitivo, que evite el desplazamiento de la producción industrial hacia áreas mejor comunicadas, han señalado los profesores César Camisón y Josep Vicent Boira, autores de un informe sobre el impacto de esta obra.
Boira ha comparado incluso la importancia de esta infraestructura con lo que supuso en 1962 la consecución del proyecto de la autopista del Mediterráneo, mientras que Camisón ha advertido de que si no se ejecuta el proyecto en el plazo previsto la Comunitat "va a perder puestos" en el mercado internacional, y que en 2020 los costes del transporte podrían aumentar hasta un 37 %.
El presidente de la Federación de Asociaciones de Productores Exportadores de Frutas y Hortalizas (Fepex), Jorge Brotons, y el de Martinavarro, Joaquín Ballester, han coincidido en calificar el Corredor como "vital" para el sector, ya que de la velocidad de entrega depende el mantenimiento de la calidad del producto.
Por su parte, Vicente Giner, vicepresidente del Comité de Cítricos, ha señalado que del funcionamiento de esta infraestructura depende el futuro de un sector, el agroalimentario, que "ha sido locomotora" para el despegue de la economía española.
Para el presidente de la Asociación Valenciana de la Industria de la Automoción (AVIA), Emilio Orta, reduciría además los costes, "nos hará más competitivos" y favorecerá la elección de la Comunitat para la implantación de nuevas fábricas de producción de automóviles.
"Nos jugamos mucho", ha añadido el presidente de PROAVE y de la Federación Agroalimentaria, Federico Félix, quien ha lamentado que políticamente la Comunitat "no pinte nada" en Madrid, ha criticado la "falta de voluntad" del Gobierno central para acometer el Corredor, y ha instado a la sociedad valenciana a movilizarse ante lo que considera una "burla" y una "injusticia".
