La apertura, ayer, de una nueva sede universitaria en la calle San Fernando 40, gracias a la cesión por parte del Banco Sabadell de del antiguo edificio de la CAM, supondrá un importante impulso para el centro de la ciudad, tal y como coincidieron en destacar durante el acto de inauguración el rector, Manuel Palomar, y los representantes de la entidad bancaria Miquel Molins y Jaime Matas.

Las actividades culturales, académicas y de empresa que se ofrecen a todos los ciudadanos en general, y a los estudiantes en particular, revitalizarán la zona más céntrica de Alicante, a un paso de la Rambla, la Explanada, el Ayuntamiento, y de la que el rector denomina como «milla de oro de la cultura y la formación» vinculando los museos MACA y Mubag, el Instituto Gil-Albert y la sede Ciudad de Alicante de la propia Universidad, con la que el nuevo edificio conformará un campus urbano.

«El Banco Sabadell y su inmobiliaria Solvia estuvimos de acuerdo desde un principio en dotar de contenido a un edificio tan monumental en el centro de la ciudad. No hacerlo habría sido imperdonable. El director general, Miquel Montes, entendió que cumplíamos con nuestra responsabilidad también social al hacer este depósito por diez años con la intención de prorrogarlo como recoge el contrato», valoró el presidente de la Fundación Banco Sabadell, Miquel Molins, y aventuró que se convertirá en un «centro cultural de primera magnitud para esta ciudad».

Idiomas

La primera actividad que acogió ayer en la primera planta de sus casi 7.000 metros cuadrados totales fue la investidura del catedrático Gabriel Tortella como Honoris Causa de la UA, y el jueves está previsto que se celebre el primer Consejo de Gobierno que sale del reciento universitario en el campus de San Vicente.

El acuerdo entre la universidad y el Banco Sabadell ha fructificado en apenas un año para centrar el nuevo espacio en «la sociedad de Alicante y sus estudiantes», como señaló Jaime Matas, director territorial de la entidad financiera. El rector, Manuel Palomar, adelantó que se incorporarán cursos de idiomas y los estudiantes Erasmus harán uso de la nueva sede en los meses de julio a septiembre: «Me gusta llamarle espacio del conocimiento socialmente responsable», concretó.

Desde el lunes, en la planta baja, se abrirá al público una sala de estudios con 125 puestos durante las 24 horas del día y también están disponibles el salón de actos que acogió la investidura, con 135 butacas, y otra sala adjunta y polivalente con 150 puestos más que se pueden retirar si hace falta para actividades de otro. La planta superior, totalmente diáfana, estará acondicionada a partir de enero.