La Conselleria de Infraestructuras prevé abrir al tráfico durante la madrugada del domingo al lunes las nuevas calzadas del acceso sur a la ciudad de Alicante, en la avenida de Elche, a la espera de que se acometa el parque lateral, que incluye un paseo peatonal y carril bici.

Con las operaciones finales de extensión del firme asfáltico en los entronques de la avenida con las intersecciones de Óscar Esplá y Federico Mayo, dentro de las obras de la segunda fase de urbanización de la entrada sur a Alicante, la Conselleria finaliza los trabajos en las nuevas calzadas de la avenida de Elche.

Ello permite eliminar el desvío establecido el pasado junio, en un suelo en el que irá el parque lateral, y establecer el tráfico en su situación definitiva.

En un comunicado, el secretario autonómico de Infraestructuras, Territorio y Medio Ambiente, Victoriano Sánchez-Barcáiztegui, ha afirmado que se cumple el anuncio de septiembre sobre que las obras estarían acabadas en noviembre "a falta de los trabajos de jardinería y alumbrado, que estarán totalmente finalizados en diciembre".

"Estamos cumpliendo los plazos establecidos", ha señalado antes de manifestar que durante los trabajos "se ha intentado minimizar al máximo las molestias de los conductores y el tiempo de ejecución de los trabajos".

Estas obras responden a la segunda fase de reurbanización de la entrada sur de Alicante, que han supuesto una inversión de 1.770.000 euros.

La Conselleria de Infraestructuras, Territorio y Medio Ambiente ya ejecutó la primera fase con un coste de 10.600.000 euros, financiados dentro del Plan Confianza.

Durante los meses que ha sido necesario el desvío, la Conselleria ha llevado a cabo los trabajos de saneamiento del terreno, establecimiento de un nuevo sistema de drenaje, ejecución de la plataforma y extensión del nuevo pavimento, todo ello como parte de la reurbanización completa y ejecución del parque lateral de la avenida, previstos en el proyecto.

La obra ha requerido el desvío provisional para recrecer la rasante de la avenida en una altura de hasta un metro en la acera del lado del barrio de Benalúa y de 60 centímetros en la arista del lado del mar.

Ahora, el movimiento del tráfico permitirá abordar las obras del parque lateral, que incluyen un paseo peatonal y un carril bici, justo en la plataforma ejecutada para el desvío.

Por otra parte, en las próximas semanas se instalará la nueva iluminación, la jardinería del lado Benalúa, la totalidad de la señalización y semaforización.