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Uno de cada ocho alicantinos vivirá solo en 15 años

El número de hogares en la provincia tiende a aumentar de manera continuada, pero cada vez son más los formados por una única persona mientras el resto van en retroceso

Un hombre mayor pasea solo por la playa en Alicante, en una imagen de archivo. PILAR CORTÉS

Los cambios en la estructura de las familias harán que, en un plazo de 15 años, uno de cada ocho residentes en la provincia de Alicante viva solo, según las proyecciones realizadas por el Instituto Nacional de Estadística (INE), dadas a conocer en los últimos días. El organismo prevé que en 2029 haya 761.688 hogares en el territorio provincial, de los cuales 231.523 estarán compuestos por una sola persona. Esto supondrá un 13% del total -es decir, prácticamente uno de cada ocho-, frente a menos del 11% que representan en la actualidad. La tendencia es a que el aumento de estos hogares unipersonales vaya en continuo aumento en este tiempo.

El INE calcula que, en estos momentos, 190.831 personas viven en soledad en la provincia, a partir de las estimaciones de población que realiza. De esta forma, en los próximos 15 años serían 40.000 más las personas sin compañía en sus hogares. Sin embargo, la previsión es que, a pesar de ese incremento, el número de habitantes vaya en descenso. Esto refleja cómo la pérdida de población -que se estima en unas 58.000 personas hasta 2029- irá acompañada de una progresiva soledad, al afianzarse todavía más las pautas familiares que ahora mismo van en aumento: más personas solas o, en todo caso, compuestos por dos individuos.

Esta última fórmula es en la actualidad la más numerosa, con 244.899 hogares. Dentro de 15 años también lo será, pero con un ligero descenso, situándose en 236.358. Con todo, lo que más llama la atención es que los hogares unipersonales quedarán a muy poca distancia. Además, cabe señalar que los datos más recientes ofrecidos por el INE a este respecto señalan que la única tipología significativa de los hogares compuestos por dos personas no es la de la pareja sin hijos, sino que también tienen una notable importancia las familias monoparentales, es decir, un padre o una madre con un hijo.

Otro rasgo importante es que el aumento del número de hogares, de forma paralela al descenso de población, pone de manifiesto el progresivo envejecimiento de la sociedad. En este sentido, hay que recordar que, según la Encuesta de Hogares de 2013, casi el 44% de las personas que viven solas en la Comunidad Valenciana tienen más de 65 años, mujeres en una inmensa mayoría de casos. La traslación de los datos a la provincia llevaba a la estimación de que en las comarcas alicantinas vivían en torno a 81.700 personas mayores sin compañía. Dada la coyuntura actual, es probable que el INE no se equivoque en sus pronósticos y que los sucesivos datos vayan confirmando la tendencia.

La media de edad de la población de la provincia de Alicante se sitúa en la actualidad en 41,51 años en el caso de los hombres y en 43,44 años para las mujeres. Estas cifras están en continuo incremento desde hace ya al menos cuatro décadas, gracias a que la longevidad de las personas es cada vez mayor. Así, la esperanza de vida para los mayores de 65 años es, según datos de 2013, de 19,51 años para los hombres y de 22,53 para las mujeres. Por lo tanto, se estima que la población femenina de la provincia puede alcanzar prácticamente los 88 años, si no sufre graves contratiempos de salud a lo largo de su vida, y que los hombres pueden superar los 84.

Las proyecciones de población, elaboradas a partir de las tendencias demográficas de los últimos años, señalan que este fenómeno irá en aumento en los próximos lustros, lo que previsiblemente obligará también a un replanteamiento en cuanto a la prestación de recursos sociales y sanitarios, al ser mucho mayor el número de personas que requieran una asistencia más directa. Sin embargo, si la coyuntura económica negativa se prolongara durante mucho tiempo, esto podría suponer un reto difícil para las administraciones públicas.

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