El vicealcalde y concejal de Atención Urbana de Alicante, Andrés Llorens, consideró que la caída de una rama como la de ayer es un fenómeno «natural» que puede darse con cierta «probabilidad», y no puede achacarse ni a que el árbol tenga ninguna enfermedad ni a que el mantenimiento no esté siendo el adecuado. Por ello, recalcó que no hay motivo para la alarma, y que los árboles de la ciudad están recibiendo los cuidados oportunos. También incidió en la posibilidad de que el viento que sopló el sábado por la noche pudiera haber debilitado la rama hasta el punto de hacerla caer. Asimismo, insistió en que lo ocurrido no tuvo consecuencias. A. T.