El príncipe Carlos Felipe continuó ayer disfrutando de la Volvo Ocean Race. De hecho, el representante de la Casa Real sueca mostró su espíritu aventurero subiéndose a la parte superior del mástil (a unos treinta metros de altura) del «Dongfeng», el barco chino participante en la Volvo. Carlos Felipe está en Alicante para apoyar a las representantes del equipo SCA, de bandera sueca.