La Asociación de Vecinos Gran Vía Sur reclamó ayer el amparo, por segunda vez en los últimos siete años, del Síndic de Greuges para que exija al Ayuntamiento de Alicante y a la Autoridad Portuaria la regulación de la carga y descarga de graneles sólidos en el muelle 17 del puerto.regulación carga y descarga graneles sólidos Actividad denunciada ante el Seprona y que según los vecinos desarrollan las empresas sin la preceptiva licencia ambiental, competencia del Consistorio. Ayuntamiento, que niega que sea necesaria siempre que se cumplan las medidas correctoras. La asociación Gran Vía Sur sostiene, por otro lado y en base a un informe de la Guardia Civil, que el movimiento de los graneles (carbón, clincker y hasta cemento), supera los valores máximos permitidos de polución movimiento de los graneles supera los valores máximos permitidos de polución varias veces al año, cuando la cifra máxima es de 35. Los vecinos denuncian las molestias en días de viento y piden el amparo del Síndic de Greuges para que exija a su vez a la Concejalía de Urbanismo que inste al Puerto a vigilar la actividad presuntamente sin licencia ambiental. En el muelle trabajan la empresas Alicante Port, Bergé y Cesa, pero no son concesionarias por lo que la responsabilidad es de la Autoridad Portuaria y del Ayuntamiento, según la queja presentada ayer.
La asociación ya envió una queja en la institución en 2007. «Desde entonces, los vecinos próximos al muelle 17 vienen soportando los efectos nocivos para su salud derivados de la contaminación», recordó ayer la Asociación en un comunicado, en el que apelaron a los derechos que les otorga la Constitución, «algo que entendemos vulnera el Ayuntamiento».
Los vecinos consideran insuficientes las medidas ambientales adoptadas por el puerto hace tres años que no sirven durante los días con viento. El Puerto mueve a año unas 720.000 toneladas de graneles sólidos. El problema es que no hay barco diario por lo que las montañas de material suelen permanecer en el muelle varios días, con lo que cuando sopla el viento también se levanta polvo.
El puerto instaló en marzo de 2011 dos nuevos tramos de barreras anticontaminación, concluyendo así la fase de instalación de pantallas cortavientos en la zona de movimiento de graneles sólidos. Desde la Autoridad Portuaria sostienen que en días de viento no se producen cargas y descargas de graneles, algo que niegan los vecinos.
