Información

Información

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

Más de dos años de retraso

Un acceso a trompicones

El nuevo vial que permitirá llegar en coche al barrio de Santa Cruz entra en su recta final

Las obras del nuevo acceso al barrio de Santa Cruz se encuentran muy avanzadas y ya se puede caminar por el nuevo vial Rafa Arjones

Los seis meses de plazo para ejecutar el demandado acceso al barrio de Santa Cruz se han convertido en 30 meses sin que las obras hayan finalizado.30 meses La Conselleria de Infraestructuras inició las obras en febrero de 2012, pero meses después se paralizaron. Fue en febrero de este año cuando se reanudaron y, aunque estaba previsto que el nuevo vial estuviera finalizado en junio, el verano ha pasado sin que lo esté. Además, en los últimos días apenas se ha visto movimiento de obreros.

Pese a todo, desde el Patronato de la Vivienda aseguran que el grueso de la urbanización está acometido y confían en que a lo largo del mes de octubre pueda finalizarse, con el nuevo ajardinamiento, el asfaltado definitivo y la iluminación. Se trata de un acceso muy demandado por los vecinos del pintoresco barrio de Santa Cruz, pues se trata del único que permite llegar a él en coche.

El acceso parte de la avenida de Jaime II y permite llegar hasta la parte alta del Casco Antiguo. El vial de subida al barrio se encuentra asfaltado y prácticamente terminado, como también están los muros de piedra que lo delimitan. Queda sin asfaltar el vial que daría acceso al aparcamiento del Portónaparcamiento , cuyas obras están paralizadas desde hace cuatro años y han vuelto a sacarse a licitación. Desde Vivienda explican que el motivo de que el vial que da acceso al parking siga sin asfaltarse es el de compatibilizar la urbanización con las obras del aparcamiento, que se reanudarán en cuanto se adjudique el contrato.

El proyecto del acceso a Santa Cruz tenía un presupuesto de 1,2 millones de euros, financiados por las arcas autonómicas. El proyecto integra parte de la muralla defensiva de la ciudad del siglo XVI que afloró durante la primera parte de los trabajos, hace ya casi dos años. En estos momentos, la muralla se encuentra a la vista, pero está rodeada de basuras.

Las obras arrancaron en febrero de 2012, con un año de retraso. Estuvieron ocho meses paralizadas por los impagos del Consell hasta que el pasado mes de febrero se reanudaron. Durante este tiempo los vecinos se han quejado de la situación en la que estaba el barrio, rodeado de obras paralizadas. El hecho de que el empinado acceso se paralizara a medio construir generó dificultades de acceso a las personas mayores, así como la imposibilidad de acceder al barrio en taxi. Ahora, las obras del vial han entrado en la recta final, por lo que desde el Ayuntamiento esperan que esté acabado el próximo mes.

Compartir el artículo

stats