La playa de San Gabriel permaneció ayer abierta al baño después de que el viernes se tuviese que cerrar por la aparición de decenas de peces muertos en la orilla. Desde el Ayuntamiento de Alicante aportaron ayer el resultado de varios de los análisis realizados, que descartan vertidos tóxicos y apuntan a una «explosión» de fitoplancton como causa de la mortandad de los peces.

En concreto, el Ayuntamiento remite a los informes realizados por el laboratorio de Labaqua y el Instituto de Ecología Litoral. Los resultados concluyen que, a excepción de los valores de clorofila, el resto de niveles eran normales. Se trata, de una «marea roja» o explosión de fitoplancton «que ha alcanzado una proliferación desorbitada», lo que explicaría «la tonalidad y turbidez del agua». Su proliferación, debido a condiciones como las altas temperaturas y la falta de movimiento del agua, «resulta nociva» porque consume el oxigeno dejando sin el mismo al resto de especies.