Agricultores de la provincia de Alicante han reclamado al Consell medidas de prevención para anticiparse a la llegada de la avispa asiática (vespa velutina), cuya presencia ya está confirmada en Galicia, Cantabria y Cataluña.

Ante los graves impactos ambientales y económicos de esta especie exótica -que acaba con las abejas y que también supone un riesgo para otros insectos y la fruta madura-, la Asociación Agraria de Jóvenes Agricultores de Alicante (Asaja) ha solicitado a la Conselleria de Medio Ambiente distintos protocolos de actuación.

Entre ellos, la agrupación ha pedido que «con tiempo se forme a los agentes medio ambientales para la detección temprana de nidos y posibles individuos sobre todo en las zonas limítrofes de nuestra comunidad con Cataluña y Aragón». Asimismo, los agricultores han reivindicado procedimientos de actuación en caso de detección de nidos.

No obstante, desde Asaja han advertido de que la colocación de trampas indiscriminadas actualmente está desaconsejada, ya que pueden entrar en ellas las avispas ibéricas que son menos dañinas y que a la larga ayudarán en el control del avispón asiático al luchar por el territorio.

La alerta de la presencia de este temido insecto saltó en 2010 en el País Vasco, y en Galicia ya se han confirmado los primeros ataques a colmenas.

Sin embargo, la Asociación Agraria de Jóvenes Agricultores de Alicante asegura que por el momento la provincia está libre de su existencia, pero destaca que su progresión será constante desde el norte. En este sentido, los expertos confían en que la avispa asiática tarde años en estacionarse en la provincia ante las características climáticas de la zona, como es el factor de la escasa vegetación unido a las altas temperaturas.

Efectos

Desde la sectorial Apícola de Asaja han explicado que «el impacto de esta especie invasora en las colmenas son similares al ataque del abejaruco, que es un ave que está especializada en alimentarse de abejas, por lo que los apicultores de la provincia alicantina ya conocen el efecto que producirá el avispón asiático».

El despoblamiento, la debilidad y la muerte por falta de vigor en las colonias, ya que dificulta que las abejas salgan a recolectar néctar y las colonias acaban debilitándose, son los principales daños que producen en este sector, además de las consecuencias colaterales para la agricultura.

Aunque los expertos han advertido de que esta «avispa asesina» no es peligrosa para las personas, la muerte de una mujer octogenaria en Galicia a causa de un infarto complicado por más de una treintena de picaduras desató la preocupación ciudadana hace dos semanas. No obstante, apuntan que el riesgo está en la reacción del cuerpo al veneno, ya que si se tiene alergia las complicaciones pueden ser más elevadas.

En la provincia, por ahora, la amenaza más inmediata para la apicultura es la presencia de un ácaro llamado «varroa destructor», que es el principal responsable de la muerte y debilitamiento de las colmenas.

Desde Asaja continúan pidiendo a las administraciones públicas ayudas para controlar esta plaga. Asimismo, la agrupación agraria está participando en un programa de vigilancia piloto de las enfermedades de las abejas organizado a nivel europeo, y como resultados preliminares se ha constatado que la infestación llega al 71% a nivel nacional.