Tres años de inquietud y sin descansar. Es el tiempo que llevan en un sinvivir los vecinos de los edificios contiguos a un inmueble abandonado en la calle San Carlos 59, muy cerca de Las Cigarreras, que se ha convertido en un foco de insalubridad por la suciedad que se acumula derivada de la actividad de personas que acuden allí a dormir y que, según denuncian los afectados, «dejan jeringuillas, basura y excrementos por todos lados, lo que atrae bichos y ratas a nuestras casas. No podemos abrir las ventanas. Y es peligroso porque hay muchas peleas», explicaron.
Todo empezó en 2010, cuando el edificio, de nueva construcción, quedó abandonado sin estrenar por problemas, aseguran, entre los promotores y los bancos. En 2011, según recordaron los vecinos, entraron personas a dormir tras apalancar la puerta, llegando a refugiarse allí decenas y ocupando las cuatro plantas. «En el último año la situación ha degenerado, han desaparecido las ventanas y la puerta, está todo lleno de bolsas de basura que se ven desde nuestras casas, de botellas y bichos». El episodio más grave tuvo lugar en abril cuando el inmueble sufrió un incendio ya que llegaron a temer por sus viviendas, momento en que recurrieron al Síndic tras numerosas quejas sin éxito al Ayuntamiento. Conservación de Inmuebles ordenó limpiarlo bajo multa de 7.000 euros a la propiedad pero sigue en insalubres condiciones. Los afectados piden que se sanee y se tabique, o que les dejen poner un candado en la puerta, algo que la Policía les impide.
