El barrio del Pla sigue sucio, según los vecinos, con sus calles «churretosas y malolientes», a la conclusión del plan de choque de limpieza diseñado por el Ayuntamiento y la concesionaria del servicio para mejorar la imagen de diversas zonas de la ciudad. El plan comenzó a finales de julio en el Pla y ha durado dos semanas pero los vecinos consideran que sus resultados son insuficientes pese a que se han doblado los días de barrido, de tres a seis, con 30 operarios frente a los 18 habituales, y refuerzo además de los baldeos.
«Transcurrido el plazo, la asociación ha comprobado que efectivamente las rutas se han barrido seis días a la semana. Esto se traduce en una menor presencia de papeles o envoltorios por el suelo pero no ha resuelto que las calles y plazas del barrio del Pla sigan llenas de manchas y de deposiciones caninas, de enseres abandonados, y de contenedores inmundos, todo ello acompañado de olores muy desagradables», manifestaron ayer los vecinos del Pla a través de un comunicado, en el que valoraron el aumento del barrido como necesario «pero en ningún caso puede considerarse suficiente».
La presidenta de la asociación, Sheila Villar, añadió que «esto ha servido para rebajar el grado de suciedad pero dos semanas son insuficientes para dejarlo limpio. Queremos que baldeen cuando tienen que hacerlo porque sólo riegan un poco con la manguera y luego huele aún peor», dijo. Por ello, la asociación reclama una limpieza integral del Pla.
Tras terminar el plan de choque en este barrio, se ha iniciado el barrido intensivo en otras zonas de la ciudad. «Una vez limpio la actuación habitual será sobre limpio», dijeron fuentes municipales.
