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Las ofertas a la baja por lograr obras en colegios ahorran medio millón de euros

Educación licita este verano una docena de actuaciones presupuestadas en 2 millones para reparar centros de la provincia. Empresas procedentes de todo el país pujan por las adjudicaciones que priman el mejor precio, sin reformados posteriores

Las ofertas a la baja por lograr obras en colegios ahorran medio millón de euros

Hasta medio millón de euros se va a ahorrar la Conselleria de Educación con la adjudicación de una docena de obras en colegios e institutos de la provincia a consecuencia de la gran competencia existente ante la escasez de obra pública.

La licitación de una docena de actuaciones por valor de dos millones de euros incluyen bajas por parte de las empresas de hasta el 30%, circunstancia que favorecerá, según sostienen desde la dirección territorial de Alicante, la posibilidad de presupuestar otra remesa de actuaciones en centros educativos antes de que acabe el año por valor de otros 800.000 euros.

Las firmas que pujan por las obras escolares proceden de toda España, «Andalucía, Galicia, Murcia..., y ofrecen importantes bajas económicas para conseguirlas aunque en ningún caso se trata de bajas temerarias porque no se adjudicarían, subraya el director territorial, José Antonio Rovira.

Sin posibilidad de reformado posterior de ningún tipo, prohibido expresamente en los pliegos de condiciones, la obra se adjudicará al mejor precio ofertado. La media de todas las ofertas más siete puntos da la medida a partir de la que cualquier baja sería temeraria, como explica el responsable de la sección económico-administrativa de la jefatura provincial, José Antonio López. «Los técnicos supervisan las obras, de forma que el precio final no afecta a la calidad», afirma.

Entre la docena de obras previstas y licitadas ayer mismo a través del DOCV (Diario Oficial de la Comunidad Valenciana), con la perspectiva de adjudicarlas a mediados de septiembre para que concluyan este mismo año, la reforma y ampliación del centro rural Azahar o La Callosina, de Callosa de Segura, es la que se lleva la mayor cantidad de presupuesto, más de 300.000 euros.

«La antigua escuela se clausuró porque se hundía y los alumnos están en aulas prefabricadas desde 2009», cinco años ya. Ahora, como explica Rovira, se van a retirar las cinco prefabricadas y arreglar tres aulas de fábrica para los 40 alumnos de la zona. «Trabajamos con el objetivo de mantener estas escuelas y no despoblar la zona, aunque resulta más costoso, porque un pueblo sin colegio es un pueblo sin futuro», subraya.

Demoliciones

El aulario El Teix de Agres presenta unas circunstancias similares y se reforzará su estructura y cubierta para los 28 escolares.

En Elche se ampliarán espacios para eliminar las prefabricadas en los colegios La Vallverda y San Antonio, además de remodelar el Rodolfo Tomás de El Altet.

De mayor envergadura son las demoliciones del aulario y el gimnasio en el Rico Sapena de Castalla y en la Hispanidad de Santa Pola -recién adjudicada-, cuyo desplome desató la alarma generalizada entre los centros con más de 40 años porque presentan patologías similares de fallos en la construcción, sin ventilación en el hormigón que, con la humedad de la zona, se derrumba.

En los institutos Santiago Grisolía de Callosa y Antoni Llidó de Xàbia, así como en los colegios Salvador Ruso de Torrevieja, Hispanitat de La Vila y Cardenal Belluga de Dolores, las reparaciones se centran en vigas, sanitarios, cornisas, bajantes y fachadas, con una duración media de las obras de tres meses, por lo que se prevé que a final de año estén acabadas. La jefatura provincial confía en actuar a continuación en otros seis centros, entre ellos la Xara de Dénia y el colegio de Sella.

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