La lenta recuperación del sector del ladrillo en la provincia de Alicante ha vuelto a ofrecer datos positivos en el segundo trimestre del año, periodo en el que los precios descendieron un 4% respecto a 2013, seis puntos menos que en el primer trimestre del año. Estos porcentajes han dejado el precio medio de la vivienda en la provincia en el más bajo desde la explosión de la burbuja inmobiliaria en 2007, en concreto en los 1.240 euros/m2, por los 1.455 euros de Castellón; 1.479 euros de Valencia y los 1.410 euros de media de la Comunidad Valenciana, según refleja el informe de coyuntura hecho público ayer por la empresa Tinsa, líder nacional en la tasación de inmuebles. Desde que comenzó la crisis hace ya siete año el derrumbe del valor de las casas en la provincia ha sido espectacular, con un descenso del 43,5%, según la tasadora. En los tiempos del «boom» del ladrillo, el precio medio llegó a rozar los 2.300 euros por metro cuadrado de media.
La ralentización, no obstante, de la bajada de los precios en el segundo trimestre del año (4% de entre abril y junio, cuando fue del 10% de enero a marzo), se debe a la consolidación del sector financiero, con una bajada de los tipos de interés y una mejora en la concesión de créditos, supeditada por las políticas de descuentos de los bancos.
Esta situación ha generado, según los analistas, una potenciación de la demanda y del número de transacciones, y en Alicante ha supuesto una todavía leve reactivación del sector de la construcción con incrementos significativos en el número de visados de obra nueva.
La provincia de Alicante confirmó una tendencia a la recuperación de la actividad a lo largo de 2013, que se mantiene en el primer semestre de 2014, con un incremento en los visados de obra nueva el pasado año del 57,1%, y en el primer cuatrimestre de este año del 29%. Es la única provincia española con esta tendencia. En cuanto a la evolución de los precios, desde que estalló la crisis inmobiliaria en 2007, el precio ha caído en torno al 47% en Valencia; 46% en Castellón y 43,5% en Alicante.
Sobre al volumen de compraventa de viviendas en la Comunidad, en 2013 descendió un 10,3 %, aunque la provincia de Alicante apenas presentó variaciones, destacando el incremento de las operaciones realizadas por parte de los extranjeros, en detrimento del comprador nacional. Según Tinsa, Alicante supo mantener el número de compraventas en 2013 gracias al incremento del mercado extranjero, en un 23%, frente al nacional que bajó un 14%. Esta tendencia hay que tomarla, no obstante, con «cautela», ya que en parte de los datos del primer semestre del año pasado se incluyeron la finalización de los beneficios fiscales por la compra de vivienda. Respecto al mercado extranjero, el mayoritario en Alicante es el británico (13%), seguido del ruso (un 11%), el francés (9%) y belga (8%).
Subidas
Respecto al balance del primer semestre del año, sólo en dos comunidades, Extremadura y Galicia, subió el precio de la vivienda respecto al mismo periodo del año anterior, bajando en el resto de las regiones y con un descenso a nivel nacional del 3,9 por ciento. En Extremadura el precio de la vivienda subió el 2,8%, mientras que en Galicia apenas lo hizo una décima, según Tinsa.
La consultora observa una moderación en la caída del precio en el conjunto del país, ya que en el primer trimestre del año el descenso de los precios llegaba al 6,7%. Los datos positivos de Extremadura y Galicia suponen las primeras subidas interanuales en comunidades autónomas desde el tercer trimestre de 2008, aunque no descarta todavía que los precios puedan volver a bajar en esos territorios, donde apenas se mueve la segunda residencia.
